"No está en el ánimo de la Consejería asumir las competencias en materia ferroviaria", señaló ayer el titular de Infraestructuras, Fernando Lastra. Primero, porque el estatuto de autonomía solo permitiría asumir las líneas que discurren íntegramente por Asturias, y, segundo, porque el deterioro de la red ferroviaria genera unas "necesidades de inversión muy intensas", que deberían ejecutarse antes del traspaso, pues el Principado "carece de recursos". De ahí el rechazo a asumir una competencia "incompleta y onerosa".
Lastra contestaba así en una comparecencia impulsada por IU para debatir sobre política general en materia de infraestructuras y ferrocarriles de cercanías de Asturias. Una comparecencia sobre la que planeó la moción de censura de mañana en el Congreso, que generó enfrentamientos entre el PP y el resto de los grupos políticos.
La comisión de Infraestructuras aprobó una proposición no de ley del PP para la instalación de mecanismos de protección y acondicionamiento de la carretera AS- 228, entre Cueva Huerta y Páramo (Teverga); otra de Foro para acondicionar la senda del Agua entre Arroxines y Rioseco (Riosa) y su inclusión en el "Programa de Turismo Sostenible del Principado de Asturias 2020"; y una tercera de Ciudadanos para iniciar las obras de la variante de Cayés (Llanera).
