Piedras Blancas,
I. MONTES
Los agentes de la Policía Local de Castrillón han tenido que tramitar 26 denuncias realizadas durante los meses de agosto y septiembre en relación con problemas ocasionados por animales en zonas públicas. De las 26 denuncias, 19 están protagonizadas por perros, según señaló la concejala de Interior de Castrillón, Mayka Barros. Los agentes han tramitado 16 denuncias contra la estancia de perros sueltos en lugares públicos, una situación que prohibe la ordenanza municipal de Medio Ambiente. Asimismo, hay otra denuncia por la mordedura de un can, otra más por los ruidos causados por un perro y otra por el acceso del animal a un gallinero que terminó con tres gallinas muertas.
La ordenanza municipal obliga a los dueños de perros a que estén con correa, y con bozal si el can pertenece a una raza potencialmente peligrosa, en los espacios públicos. «Los vecinos también han denunciado en estos dos meses de verano caballos sueltos, los problemas que ocasionan los gatos e incluso las avispas y hasta las aves rapaces», manifestó la concejala. La normativa municipal establece sanciones para los propietarios de animales que incumplen la ordenanza y que pueden ser de entre 6 y 300 euros. En el caso de los perros la normativa está clara pero para otros animales, las sanciones se refieren al maltrato, el abandono o la utilización de animales en peleas.
Las quejas vecinales más corrientes se refieren a la estancia de perros sueltos en parques infantiles, pese a estar prohibido por la ordenanza, en las zonas próximas a las playas o incluso en las calles de Piedras Blancas, Salinas y Raíces. La estancia de perros en la playa está autorizada desde ayer 1 de octubre. La demarcación de Costas en Asturias prohibe la estancia de perros en los arenales desde el 1 de mayo hasta el 30 de septiembre.
