La economía asturiana crecerá en torno al 05,% este año, después de caer de manera continuada desde 2012 y de cerrar 2013 con un desplome del 2,1%, el mayor del país. La previsión es del Consejo Asesor de Asuntos Económicos de Presidencia del Principado -coincide con la de Hispalink- y presume que este año se producirá una "estabilización del mercado laboral y una mejora de las expectativas empresariales" en la industria. Aún así, el comité de expertos indicó que para consolidar esta tendencia, se debe apostar por la industria, los servicios avanzados y la ejecución de la obra pública licitada, además del comercio internacional, con un cambio en la política económica.

El presidente del consejo, Juan Vázquez, advirtió de que más recortes salariales y ajustes no van a mejorar la competitividad, que sólo se logrará a través de la innovación, "de hacer las cosas mejor, y de hacer cosas nuevas". Por eso reclamó celeridad en los cambios y en la aplicación de nuevas políticas, para que "cuando se consolide la recuperación, Asturias se encuentre en condiciones de aprovecharla".

El impacto de la crisis ha supuesto para Asturias la pérdida de más de 9 puntos de PIB, frente a los aproximadamente 6 que ha significado para el conjunto del país.

El comité de expertos presentó ayer un decálogo de iniciativas para impulsar la economía asturiana, entre las que figuran el impulso del sector de la agroalimentación y el mundo rural, la búsqueda de fórmulas para "hacer del envejecimiento una oportunidad" y "aprovechar los efectos tractores del nuevo hospital" (HUCA). También alertó de la necesidad de defender las fuentes de financiación que llegan de la Administración Central teniendo en cuenta la próxima reforma fiscal.

La economía regional depende de la española, y de la misma manera que tardó más en sentir el impacto de la crisis al principio, también es de esperar "cierto retraso o menor intensidad" en la recuperación, asegura el comité asesor. En este proceso, el sector servicios será decisivo para consolidar la mejoría, pero es "la industria lo que resulta determinante y diferencial" para conseguirlo, por el efecto de arrastre que supone para el conjunto del Principado. Los expertos también incidieron en que el sector exterior seguirá siendo "determinante para la consolidación y la intensidad de la recuperación".

El consejo asesor resumió diez iniciativas que, a su entender, ayudarían a incrementar la productividad, la competitividad y la modernización de la estructura económica de la región. Algunas ya son conocidas, como la necesidad de crear "un nuevo marco" para el desarrollo empresarial, que implicaría, entre otras medidas, acabar con las tradicionales subvenciones, o reforzar los instrumentos de internacionalización; profundizar la reforma de la administración; impulsar la innovación.

Pero una de las propuestas más novedosas es la de aprovechar la riqueza económica que puede suponer para la región el envejecimiento de la población. La trascendencia de este factor es de tal magnitud que el comité de asesores va a realizar un estudio específico para analizar cómo se podría actuar eficazmente en la política demográfica de Asturias.

"En materia de población, las cosas no se pueden cambiar de un día para otro, pero habrá que estudiar cómo dar la vuelta a esta situación y sobre todo cómo podemos hacer para que surjan nuevos nichos de actividad económica con esta situación, analizando las pautas de consumo y de ahorro, por ejemplo", explicó Juan Vázquez.

El nuevo Hospital Central Universitario de Asturias (HUCA) también puede ejercer un enorme efecto tractor, convirtiéndose en "un polo de crecimiento", al ofrecer posibilidades de desarrollo de la formación, el conocimiento y la investigación, además de facilitar la conexión con la industria en materia de innovación.