Sara Baras, bailaora, actuará el sábado en Gijón: "Paco de Lucía es quien más infuencia ha tenido en mí por su humildad y seriedad con el arte"

Sara Baras llega con su compañía, que cumple 25 años, este sábado a Gijón al teatro de la Laboral. Donde la bailaora y coreógrafa presentará a las 20.00 horas "Vuela", su nuevo espectáculo.

–¿Se imaginaba hace 25 años estar así?

–Miras atrás y te sientes muy orgullosa de no haber bajado la guardia nunca. Y muy agradecida al público, porque si nos mantenemos ahí es porque han respondido desde el principio. Por un lado siento la responsabilidad que a veces es fuerte, pero me siento muy agradecida a la vida de todo lo que ha pasado a la compañía y cómo hemos evolucionado y crecido a lo largo de estos 25 años.

–¿Aún es complicado sacar adelante una compañía de baile?

–Cuesta mucho. Es muy difícil. Pero tenemos ese respaldo del público, que es la mayor ayuda para poder sacar adelante esta experiencia de sacar adelante una ilusión. Sigue costando mucho y hay que trabajar cada propuesta para sacarla adelante.

–¿Hay barreras que romper en esta disciplina o va calando más en la sociedad?

-No quiero ser repetitiva con lo del público, pero he notado ese respaldo desde hace 25 años. Por eso soy bastante optimista. Porque llegamos a pisar los teatros más importantes del mundo, a representar más de 4.000 funciones, a tener más de 300 coreografías y 18 espectáculos. Es un sueño que se debe a la afición y entrega del público por el baile. No me quejo, pero claro que veo que la cosa está mejor y ha avanzado mucho.

–¿Qué ofrecen en "Vuela"?

-Normalmente cuando se cumple una cifra signifiactiva se repite algo que te haya marcado. Y a nosotros ha sido el maestro que más influencia ha tenido en mí, como es Paco de Lucía, con el flamenco universal. Tuve la suerte de tener una amistad con él y sus consejos. Se lo he dedicado, y es un regalo. Por eso la obra es, a través de cuatro actos, un recorrido en el que es muy importante la madera, el mar, la muerte y el poder volar. Hay momentos con la música del maestro y otra dedicada a él. Era un reto poder coreografiar su música y también poder dedicarle música a él.

–¿Cómo le ha marcado Paco de Lucía?

–Destacaría su sentido del humor y a la vez su seriedad con su arte. Y su humildad, cariño y ganas de luchar porque este arte sea grande y reconocido en el mundo. Me ha marcado mucho que nunca dejara su guitarra, porque tenía esa responsabilidad y presión tan grande de ser el gran maestro. Nunca bajó la guardia y tuvo una entrega total, con una mirada humilde, dentro de la grandeza que tenía su arte y persona.

–¿Por qué recomendar al público sumergirse en un espectáculo de música y baile?

–Hay que dejarse llevar, y más en estos momentos. Es muy bonito el directo, sentir en el momento. Se puede ver un equipo que entrega al 100 por ciento su alma y corazón, mediante un arte que se clava en el corazón.

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