Con la esperanza de que a la tercera sí fuese la vencida, el gallego Pablo Nogueira se presentó este año otra vez a la prueba de residentes de Enfermería, celebrada a inicios de año, bajo la tutela de una academia particular. Tenía la esperanza de conseguir por fin plaza, pero él mismo se sorprendió al ver que no solo había aprobado, sino que había quedado en primera posición por orden de nota y por delante de otros 9.200 aspirantes. Original de un pueblo de Pontevedra, Nogueira, a sus 26 años, tuvo el privilegio de escoger su plaza de residencia en cualquier hospital de España, y ha decidido venirse al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA

¿Tuvo dudas? Sí. "Muchas". Él había dado por hecho que si le dejaban escoger no iba a abandonar Galicia. De hecho, aún cree que en cuanto acabe de formarse en la región regresará a su tierra para ganarse una plaza fija. Pero de momento se viene a Asturias porque le empezó a "picar la curiosidad" hace meses y acabó contactando con algunas residentes que ya están por hospitales de la zona. "Claro, este año no tuvimos ocasión de ver los sitios ni nada, así que me guié por lo que me contaban otros compañeros por redes sociales. Para lo que a mí me interesa, Asturias es de los mejores destinos. Luego escogí el HUCA, resume.

Mientras tanto, Nogueira pasará el verano trabajando en las Urgencias del Hospital de Santiago de Compostela. Hasta ahora ya ha tenido que atender algún caso sospechoso de covid-19 pero, reconoce, ha superado el pico epidémico "sin ningún susto". "Me voy a Asturias en septiembre y ahí ya no sé qué pasara. No tenemos ni idea de si habrá rebrote", reconoce.

La rama sanitaria le empezó a llamar la atención en el Bachillerato, pero su vocación como enfermero la está reforzado ahora. "En su momento, si me hubiese dado la nota, puede que hubiese hecho Medicina pero, la verdad, yo hasta ahora fui de aprobarlo todo siempre, sí, pero sin demasiada nota. Lo que sí tengo más claro ahora es que la especialidad de Familia es la que más me llama porque creo que tiene mucho futuro y muchas aplicaciones distintas", concreta. Cree haber elegido bien: "Ahora me doy cuenta de que ser enfermero te permite tener más contacto con el paciente, ser más personal. A mí me va más eso".

Sabe que su generación se enfrenta a un futuro probablemente precario pero, aclara, "la cosa de los contratos no está peor en Asturias que en el resto de España". "Lo que sí parece es que ahí a los residentes se nos da cuerda para poder aprender. Yo me quedo con eso", concluye.