Los guardas supervisarán solo las batidas al inicio y al final, no estarán durante toda la cacería

Cazadores durante una batida en Asturias. | Mara Villamuza

Cazadores durante una batida en Asturias. | Mara Villamuza / M. CASADO / V. DELGADO

La Consejería de Medio Rural y Cohesión Territorial del Principado de Asturias ha estimado parcialmente la práctica totalidad de las alegaciones presentadas por la Asociación Profesional de Vigilantes de Seguridad Privada y la Asociación de Guardas de Caza a la propuesta de modificación del reglamento de caza. Entre las aceptadas destaca la eliminación de la grajilla como especie cinegética, el aumento de las indemnizaciones –pero no triplicándolas, como pedían– de las especies cobradas ilegalmente y la supresión del control poblacional en las zonas de seguridad. No obstante, el Principado rechaza las alegaciones hechas por los guardas de mayor calado. Por ejemplo, desestiman que los guardas acompañen a los cazadores durante todo el tiempo que duren las batidas.

La Consejería defiende que, debido a los avances tecnológicos, “no es necesario el acompañamiento permanente del guarda, dado que supone una carga desde el punto de vista de los recursos humanos del Principado”. Solo vigilarán al inicio y al final.