El bonito reina en las mesas de Luanco

Las Jornadas gastronómicas del Festival del Bonito de Luanco se vienen celebrando de forma continuada desde hace 41 años coincidiendo con el principio de la costera del bonito, en el concejo de Gozón.

Son unas de las jornadas gastronómicas más veteranas de Asturias y una de las que gozan de mayor popularidad siendo referencia de las actividades gastronómicas asturianas en torno a la mar y los pescados del Cantábrico.

El Festival está organizado desde el principio por la asociación de hostelería local (hoy Junta Local de Otea Gozón) con la colaboración del Ayuntamiento de Gozón y de Otea.

Desde el pasado viernes 28 de junio al próximo domingo 7 de julio Luanco acoge la XLI edición de esta esperada cita gastronómica en la que Otea ha preparado la página escapadaasturias.com donde aparece toda la información de los participantes: ubicación, horarios, imágenes...

La iniciativa

Los establecimientos participantes en las jornadas pueden ofrecer dos tipos de propuestas: por un lado, un plato o menú de las Jornadas del Bonito: elaboración tradicional o innovadora dónde el bonito sea uno de los ingredientes principales. Y por otro, una tapa o pincho que consiste en la elaboración en formato pincho o tapa en el que figure el bonito como ingrediente.

El precio de venta de las propuestas de las Jornadas gastronómicas del bonito es libre.

Por todo ello, los amantes del delicioso bonito del Cantábrico tienen una visita obligada a Gozón durante estos días para dar cuenta de uno de los grandes productos del mar, un túnido que en Luanco saben preparar como nadie.

El bonito de oro

Las Jornadas se presentaron la semana pasada y durante el acto, como es habitual cada año, la junta local de Otea Gozón hizo entrega del Bonito de Oro, que es la máxima distinción de la hostelería de Luanco y que este año buscaba, en palabras de Jesús Paradero, presidente de Otea Gozón, "dar importancia a un sector vital para Luanco; honrar en conjunto a todos los marineros y pescadores cuyo duro trabajo contribuye a la riqueza del concejo, además de surtir de los mejores manjares del Cantábrico a todos nuestros establecimientos".

Lo hicieron a través de dos patrones de barco parroquianos del Cabo Peñas: Julio Fernández y José Luis Gutiérrez, "con veteranía y dedicación por la mar"; uno de ellos ya jubilado y el otro recién llegado de una jornada pescando bonito.