La situación de los tres acuerdos en Asturias de PP y Vox tras la ruptura entre los partidos: "Todo está en orden"

El partido más conservador garantiza que la ruptura con el PP en varias autonomías alcance a los pactos locales de Tineo, Castrillón y Amieva

Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal se saludan en el Congreso de los Diputados.

Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal se saludan en el Congreso de los Diputados. / DAVID CASTRO

Sergio Martín

El terremoto causado tras el anuncio de Vox de romper los pactos de gobierno de coalición con el PP en las comunidades autónomas no tendrá repercusión en los ayuntamientos asturianos. Así lo aseguró la formación verde en un comunicado en el que destacó que los acuerdos alcanzados en Tineo –donde forman parte del gobierno municipal–, Castrillón y Amieva "se están cumpliendo y continúan con normalidad". En ese sentido, Vox señaló que "todo está en orden" y que seguirán siendo "coherentes con nuestros principios sin sobrepasar ninguna línea roja" ya que "la decisión se circunscribe a los gobiernos autonómicos en los que Vox cogobernaba".

El partido de Abascal aprovechó también ayer para arremeter contra el Gobierno asturiano del socialista Adrián Barbón por su disposición a acoger a 24 menores migrantes, con arreglo a un reparto aceptado por las autonomías del PP que ha desencadenado la crisis en las alianzas autonómicas de las derechas. La diputada asturiana Sara Álvarez Rouco señaló: "Con esta decisión de no apoyar el reparto de los 24 menores no acompañados que llegarán a Asturias, Vox ha vuelto a ser consecuente con su ideario y su posicionamiento frente a la inmigración ilegal, de manera que nadie puede verse sorprendido".

Álvarez Rouco criticó la postura del presidente Barbón, "cuyos argumentos se reducen a repetir mensajes falsamente solidarios con estos menores a los que piensa acoger después de ofrecerles un futuro incierto a cargo de una Consejería de Servicios Sociales cuya capacidad deja mucho que desear". La portavoz de Vox añadió que "lo que persigue el señor Barbón es poco más que un titular favorable, pero sin auténtica proyección a futuro ni soluciones de fondo a un problema que no hará sino crecer". La parlamentaria defendió que Vox mantenga su posición "frente a este problema de la inmigración ilegal con la misma firmeza que ha mostrado hasta ahora".

El Gobierno local de Gijón fue "pionero"

Con todo lo sucedido en el panorama político nacional en los últimos días, cobra relieve el movimiento que ya hiciera hace meses el Gobierno local de Gijón, formado por Foro y PP y, en un primer momento, también Vox. El ejecutivo liderado por Moriyón, que tenía concejales con competencias adscritos a los tres partidos, acabó excluyendo a la agrupación situada más a la derecha al poco tiempo de formarse.

Moriyón y su gobierno decidieron sacar a Vox de la ecuación utilizando como detonante sus polémicas decisiones en torno al Festival Internacional de Cine de Gijón (FICX). Pero lo cierto es que la Alcaldesa de Gijón criticó en ese momento la labor que había desempeñado el partido de Abascal durante los apenas cuatro meses de gobierno que llevaban. "No están a la altura de una ciudad como Gijón”, “atentan contra la tolerancia que siempre caracterizó y va a seguir caracterizando a la ciudad” o “antepone sus intereses partidistas al interés general de los gijoneses”. Fueron algunas de las palabras que dedicó la líder de Foro a Vox.

La jugada le salió bien al ejecutivo de coalición de Foro y el PP, puesto que uno de los concejales de Vox, Óliver Suárez, se separó de sus siglas manifestando su apoyo al equipo de gobierno y permaneciendo como presidente de la empresa municipal Divertia. El movimiento fue "pionero" respecto al terremoto actual en la política nacional puesto que supuso el distanciamiento de la derecha moderada con Vox, aunque a la inversa, siendo en este caso la derecha moderada (Foro) la que marcó distancias y no al revés, como ha sucedido ahora con la crisis derivada del reparto de los menores inmigrantes no acompañados entre autonomías.

Pero también fue "pionero" al suponer la baja del partido de Abascal de un cargo de gobierno que ha permitido que el ejecutivo gijonés pueda continuar su labor sumando mayoría en el Pleno y con estabilidad. Es algo similar a lo que está aconteciendo ahora en Extremadura, donde el único consejero de Vox de la Junta, Ignacio Higuero, se ha desmarcado de su partido y seguirá en el gobierno junto al PP de María Guardiola; o también con algunos consejeros de Castilla y León.

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