Un mítico campeón de rally regresa a Avilés a bordo de un Ferrari

La Escudería Avilesina agasaja al ocho veces campeón de España de rallies con motivo del 40º aniversario de su épica victoria en el Rally San Agustín

Antonio Zanini toma contacto con el Ferrari 308 GTB con el que mañana tomará la salida protocolaria del Rally de Avilés. Le acompaña el dueño del vehículo, "Titi" Sánchez.

Antonio Zanini toma contacto con el Ferrari 308 GTB con el que mañana tomará la salida protocolaria del Rally de Avilés. Le acompaña el dueño del vehículo, "Titi" Sánchez. / J. B. Pino

Francisco L. Jiménez

Francisco L. Jiménez

Una de las páginas de oro del automovilismo avilesino la escribió en 1984 el piloto Antonio Zanini (Barcelona, 1948) al volante de un Ferrari 308 GTB con el que obtuvo la victoria en el Rally San Agustín (ahora Rally Histórico de Avilés) por la nimia diferencia de dos segundos sobre el Renault 5 Turbo de Genito Ortiz tras la disputa de 18 tramos que totalizaban 172,5 kilómetros cronometrados.

Cuarenta años más tarde, esa página dorada se desempolvará esta tarde para deleite de los aficionados a los rallies: Antonio Zanini reeditará viejos laureles en Avilés a los mandos de una réplica exacta del Ferrari que le permitió ganar su octavo título de campéon de España de rallies. Como entonces, en el baquet del copiloto estará sentado Josep Autet, quien anoche acompañó a Zanini en el homenaje que le tributó a ambos la Escudería Avilesina, que preside José Ignacio López y que organiza entre hoy y mañana la 48ª edición del Rally Histórico Avilés (antes Rally san Agustín). Zanini será, en concreto, el primer piloto en tomar la llamada salida protocolaria, un vistoso paseíllo de coches de carreras por las calles de Avilés desde la plaza Pedro Menéndez hasta El Parche.

Josep Autet, «Titi» Sánchez, José Ignacio López, Mariví Monteserín, Antonio Zanini y Chema Pérez-Ullivarri, ayer, en el homenaje tributado al piloto catalán en Avilés. | Mara Villamuza

Josep Autet, «Titi» Sánchez, José Ignacio López, Mariví Monteserín, Antonio Zanini y Chema Pérez-Ullivarri, ayer, en el homenaje tributado al piloto catalán en Avilés. / Mara Villamuza

Cuenta José Ignacio López que la presencia aquel año 1984 de Zanini en el Rally San Agustín fue muy importante en el aspecto deportivo –por lo mucho que se jugaba el a la postre el campéon de España en su duelo con el piloto oficial de Renault, Genito Ortiz–, pero aún más en términos de imagen y prestigio para la prueba local "dado el carisma del piloto".

Ese "carisma" del que habla López lo conserva intacto Zanini, al que aún la gente para por la calle para expresarle su admiración y respeto como leyenda deportiva que es. El piloto corresponde amablemente a todo el mundo y aún conserva fresco el recuerdo de aquel rally avilesino que ganó in extremis en 1984 (y eso que venció en un total de 39 pruebas del Campeonato de España e hizo 63 podios entre 1971-1986): "¡Cómo olvidarme! La cosa empezó torcida porque el coche llegó a Avilés con un problema de junta de culata y hubo que conseguir una de recambio a toda prisa; llegó por los pelos y tuvimos que pedir una moratoria a la organización para poder montarla. Luego, en carrera, fruto del montaje apresurado de la pieza, en unos tramos el coche iba con siete cilindros y en otros, con ocho. Así fue que los tiempos entre el primero y el segundo salieron tan reñidos".

Zanini viaja al Avilés de 1984 a bordo de un Ferrari

El piloto al volante de la unidad con la que ganó el Rally San Agustín en 1984. / J. B. Pino

Zanini todavía recuerda que la carrera de 1984 se decidió en el tramo Xagó-Endasa y expresó su deseo de volver a recorrerlo –esta vez en plan paseo– aprovechando su estancia estos días en Avilés. Por su parte, lo que esperan con ansia los aficionados asturianos a los rallies es ver de nuevo al volante del Ferrari 308 GT –así sea solo en el paseíllo protocolario de esta tarde del Rally de Avilés– al "Marqués de Viladrau", así apodado por su impresionante palmarés y su talento para pilotar.

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