Una conversación de músicos de primera

El Festival de Música de Cámara reúne a primeras figuras que celebran la cercanía y comunicación con el público

Músicos participantes en el festival, en la calle Galiana

Músicos participantes en el festival, en la calle Galiana / Mara Villamuza

Carolina Escudero

El violonchelista Gabriel Ureña trae a Avilés por primera vez el festival de Música de Cámara, bautizado como "AvilÉsMúsica", que se prolongará hasta el próximo sábado. El director creativo de esta "selección de músicos" piensa que "la ciudad reúne todas las condiciones para hacer este tipo de eventos, al no haber nada parecido y espera que se repita".

"Lo interesante de este tipo de agrupaciones es la conversación entre los músicos y la cercanía al individuo", indica Anna Nilsen, una de las violinistas que estará estos días en la villa. Los músicos resaltan el ambiente acogedor que genera esta cita y la captación de emociones.

Interpretarán diversas obras características de la música de cámara, como por ejemplo, de Schumann, Falla o Brahms. "Están escogidas para ser reconocibles por el público y también variar las agrupaciones y que los músicos nos conozcamos mejor", cuenta Ureña. Pese a que la mayoría ya habían coincidido antes, resalta la importancia de aprender de unos a otros y aprovechar esta unión.

Algunos como el pianista Ludmil Angelov confirman su ilusión de "poder comunicarse de esta forma tan íntima y en una ciudad tan acogedora". Una ciudad pequeña pero dispuesta a deleitarse con los clásicos. Según Ureña, "ya hay sold-out" para mañana y esperan volver a agotar las entradas para el resto de días. El jueves ofrecerán clases magistrales para los alumnos que cursen estudios superiores de música. Recibirán consejos de la mano de artistas de todo el mundo que seguro nunca olvidarán.

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