Parece que llega el fin de la problemática de las escuelas infantiles de Siero. El Principado de Asturias cederá las competencias en materia de educación pública de hasta 3 años al Ayuntamiento manteniendo su aportación económica. Todo queda igual que hasta ahora sólo que el responsable único del funcionamiento de las escuelas será el municipio. Se trata de la fórmula jurídica propuesta por los técnicos municipales a la consejería de Educación ante la negativa de Siero a firmar el convenio enviado por la comunidad autónoma para renovar el rubricado en el año 2002. El alcalde, Ángel García, aprobó ayer el decreto para consentir el convenio. Unos inconvenientes que han retrasado la apertura del periodo de matriculación que motivó la reivindicación de las familias afectadas.
"El modelo no cambia pero el modelo administrativo será otro, ceden las competencias al Ayuntamiento y el Principado mantiene la aportación económica", señalaron escuetamente fuentes municipales. Todo parece así indicar que Educación se ha comprometido a abonar los 390.000 euros que debía al concejo por el curso 2019-2020 que finaliza ahora y que era una de las principales exigencias de Siero para sacar adelante un acuerdo.
La nueva fórmula viene dada después de que los servicios de Secretaría e Intervención municipales advirtiesen al equipo de gobierno del PSOE que tal y como se planteaba el acuerdo desde el Principado pondrían reparos a su firma. Así lo explicó el alcalde, Ángel García, el pasado jueves en el Pleno que debatió este asunto.
Así las cosas, el municipio se encargará como hasta ahora del mantenimiento y gastos corrientes de las dos sedes que tiene en la Pola y Lugones y recibirá una dotación económica anual por parte de la consejería de Educación para el desarrollo de la actividad en ambos centros.
Las familias, que ya tienen abierta la matrícula desde el pasado jueves, señalan que están "alucinando porque estuvieron diez meses con ello y ahora lo hacen en tres días", cuestiona la portavoz de los afectados, Laura Sánchez. Además, ponen el foco sobre cómo será el nuevo acuerdo entre el Ayuntamiento y Educación, "habría que ver en qué condiciones se transfiere la competencia". Con todo, señala que las familias no son ni grupos políticos ni abogados y que su único interés es que se abran las escuelas infantiles, un servicio público en aras de la educación temprana y la conciliación.
Así, la polémica de las escuelas infantiles parece que llega a buen puerto con el acuerdo entre municipio y autonomía para firmar un nuevo convenio que asegura la continuidad del servicio.
