Las asociaciones asturianas de sidra casera unen sus fuerzas en una federación a nivel regional

La federación aglutina a las asociaciones de Piloña, Caudal, Siero, Ribadesella, Ribadedeva, Parres, Gozón, Salas y la Fundación Asturies XXI, y se espera que se sumen más en el futuro

Las asociaciones de sidra casera de Asturias unen fuerzas.

Lucía Rodríguez

Lucía Rodríguez

Unir a los elaboradores caseros de la región, defender sus intereses y promover la cultura sidrera. Estos son, entre otros, algunos de los objetivos con los que nace la Federación Asturiana de Asociaciones de Sidra Casera que ha sido presentada oficialmente este domingo en Nava. El acto tuvo lugar en el Museo de la Sidra de la localidad que, además, será también el domicilio social de dicha entidad tras ser aprobado por el patronato el pasado mes de abril.

Las asociaciones fundacionales son las de Piloña, Caudal, Siero, Ribadesella, Ribadedeva, Parres, Gozón, Salas y la Fundación Asturies XXI. En la asamblea que sirvió como institución de la federación, se aprobaron tanto los estatutos, como la directiva, presidida por Avelino Fuentes (Piloña), con Vicente Ardura (Caudal) como vicepresidente, Casimiro Fernández (Siero) como secretario e Iván Prieto (Ribadesella) como tesorero.

Fuentes explica que "no buscan comercializar su producto, sino conservar una tradición y un patrimonio cultural. La sidra casera es la base de la cultura sidrera asturiana". La creación de la Federación Asturiana de Asociaciones de Sidra Casera es "un sueño hecho realidad", indica su presidente. El proceso se inició ya en 2022 a iniciativa del Club Sierense de Amigos de la Manzana (CSAM). "Nos dimos cuenta de que existía la necesidad de reorganizar todas las iniciativas existentes en la actualidad, con el objeto de repensarlas, organizarlas y retroalimentarlas, en un proceso abierto a la participación de todas las personas y organizaciones que viven y sienten ese aspecto fundamental de la cultura asturiana de la sidra", detalla Casimiro Fernández, presidente de CSAM.

En este sentido, Avelino Fuentes señala que "ya hay tres asociaciones más que están en proceso de integrarse en la federación y, es más, hacemos un llamamiento para que se vayan uniendo más en el futuro, para hacer fuerzas y estrechar lazos entre nosotros". A pesar de esta unión, uno de los hechos que detalla el presidente es que "no pretendemos inmiscuirnos en las actividades diarias programadas por cada asociación a nivel individual, ni nunca lo haremos. Eso es algo independiente". Tanto es así que "así está recogido en los estatutos".

Uno de los proyectos que llevará a cabo la entidad, tal y como indica Avelino Fuentes, es "realizar un calendario de eventos bien coordinado, que integre concursos, exposiciones, degustaciones o cursos y talleres de elaboración de sidra". Esto último "es fundamental para transmitir conocimientos y experiencias a las nuevas generaciones". Y es que "el relevo generacional está muy 'chungo'. No hay gente joven que quiera seguir con esto", subraya Fernández, quien añade que "es una pena ver cómo se están echando a perder pumares en la zona rural".

A la presentación oficial de la Federación Asturiana de Asociaciones de Sidra Casera acudieron la directora general de Desarrollo Rural e Industrias Agrarias; Begoña López; el alcalde de Nava, Juan Cañal; autoridades de los concejos participantes y representantes de las asociaciones fundadoras.

Una de las cosas que destacó Begoña López, y en la que coincide también el alcalde naveto, es en que "la creación de esta entidad es fundamental, precisamente en un momento en el que Asturias tiene un gran reto sobre la mesa: el reconocimiento de la sidra como Patrimonio Mundial Inmaterial de la Unesco".

Una vez finalizado el acto de presentación, los asistentes, que abarrotaron el interior del Museo de la Sidra de Nava, pudieron degustar unos culines de sidra y adquirir un vaso con el logo de la asociación, diseñado por Dolores Álvarez.

La Federación de Asociaciones de Sidra Casera de Asturias se presenta como un actor importante en el sector sidrero asturiano. Su trabajo será fundamental para mantener viva la tradición de la sidra casera y asegurar su futuro.