Las trabajadoras del comedor del colegio José Bernardo, en Sama, llevan meses sin cobrar

IU exige a Educación que asuma el sobrecoste del menú y que el año que viene modifique el modelo de gestión del servicio escolar

Protesta de las familias afectadas ante la Junta General del Principado

Protesta de las familias afectadas ante la Junta General del Principado / D. O.

David Orihuela

David Orihuela

La crisis del comedor escolar en el colegio José Bernardo, en Sama, no afecta solo a los padres de los niños que pagan el menú diario y que han visto como el precio se incrementaba de 5 a 8,25 euros. IU de Langreo ha denunciado que “las trabajadoras del comedor han sido subrogadas (por la nueva empresa adjudicataria) y se les deben varias nóminas”. La coalición pide una solución a este impago.

La quiebra, el pasado 28 de febrero, de la empresa adjudicataria del comedor del José Bernardo, “ha dejado en una situación preocupante a los alumnos y sus familias”, aseguran desde IU. La formación apoya las movilizaciones de los padres y exige a la Consejera de Educación, Lydia Espina, “que dejé de escurrir el bulto y resuelva el problema que se ha ocasionado desde la Consejería”. El coordinador de IU en Langreo, David Álvarez, explicó que “se estima que se puede cubrir el coste para este curso con 17.000 euros, cantidad que se puede obtener de los 7.600 euros de la fianza de la empresa quebrada y de los 12.000 euros que tiene el colegio de remanente en su fondo para becas de comedor”. “En todo caso”, continúa Álvarez, “es una cantidad perfectamente asumible con los fondos propios de la Consejería de Educación”.

Desde IU ven los comedores escolares como “un recurso fundamental tanto de conciliación familiar como de apoyo a las familias con menos recursos” y por ello, “debe garantizarse su prestación a precios asumibles por las familias como un servicio público básico”.

Ante la crisis que ha surgido este año con la quiebra de la empresa y la subida de precio con la nueva adjudicación, IU cree que para el futuro “debe habilitarse personal y medios para que el comedor del Colegio José Bernardo se cubra con personal contratado por la Consejería de Educación, realizándose en el propio colegio, y no por empresas privadas, garantizando una oferta de menús sanos, saludables y a un precio asequible”. Para la coalición de izquierdas, esta fórmula de gestión directa “debería extenderse al máximo posible de comedores escolares, evitando la actual escalada de precios de las empresas privadas, y la situación de desigualdad actualmente existente entre los distintos centros escolares”.

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