De un pastillero automático a un sistema para detener kamikazes: estas son las ideas de los jóvenes asturianos en Valnalón

El ingenio de los jóvenes emprendedores no tiene límites, y sus proyectos de innovación cada año llegan a nuevas cuotas de originalidad. Más de un centenar de alumnos de cinco colegios presentaron en la mañana de este miércoles sus propuestas en la Feria de Innovación Innovapetit impulsada por Valnalón, un semillero de ideas que no han dejado indiferentes a los integrantes del tribunal de expertos: Juan Carlos Aguilera, de FAEN, Lucía Menéndez, del Clúster TIC y el investigador Daniel Fernández.

No hubo premios, porque el mejor premio para los chavales fue precisamente exponer sus trabajos ante los entendidos, dejando claro que la innovación es cosa de jóvenes. Procedentes de los colegios Santa María del Naranco, el IES La Fresneda, el IES Ramón Menéndez Pidal de Avilés, el IES Universidad Laboral de Gijón y el IES Virgen de Covadonga de El Entrego, los escolares ofrecieron una amplia gama de proyectos (un total de 24) entre los que cuentan desde pastilleros automáticos para que las personas mayores no se hagan un lío con la medicación, gracias a un dispensador que les da la dosis adecuada a la hora que corresponda, o cepillos de dientes con sistema que dosifica la cantidad de pasta necesaria para una correcta higiene bucal.

Otros, como los chavales de El Entrego, apostaron por corregir un problema común en las aulas. "Vimos que muchos de nuestros compañeros están empezando a tener chepa porque se sientan de forma incorrecta en la silla, así que pensamos que había que hacer algo por corregirlo", explicaba con desparpajo Olai Morán. Así que se pusieron manos a la obra y diseñaron un sistema de sensores que detectan el peso y la presión del cuerpo en la silla. Cuando detecta anomalías, se enciende una luz roja en el respaldo, que el profesor puede ver desde su mesa para llamar la atención del alumno para que se siente correctamente. "Creemos que puede ser muy útil", aseguran los chavales.

Otros, como Mateo Fernández, Pelayo Cortina, Rubén García y Marcos Llera, del Colegio Santa María del Naranco, apostaron por diseñar una escalera mecánica que pasa a ser una rampa de forma automática cuando se necesite, de manera que las personas con movilidad reducida no se vean obligadas a usar un paso diferente.

En el IES de La Fresneda han diseñado un sistema para detener a los kamikazes que entran en sentido contrario en autovías y autopistas, gracias a un sistema de pinchos que se acciona cada vez que alguien circula en sentido contrario, y que a su vez activa una alerta de avisos luminosos, la bajada de barreras a la entrada y salida de la incorporación, un aviso instantáneo al 112 y la activación de los paneles de aviso en la autovía.

No faltaron propuestas para limpiar los microplásticos de las playas con cepillos especiales, sistemas para mejorar los accesos a los parkings sin olvidar dónde se ha dejado el coche, rascadores para las personas con movilidad reducida, automatismos para las personas a las que les cuesta expresar sus sentimientos, de manera que puedan comunicarse con sencillez gracias a las nuevas tecnologías o sistemas para abrir la puerta a los servicios de emergencias cuando un anciano que vivesoloo activa la medalla de petición de auxilio.

Se trata en todos los casos de innovaciones que "se podrían ver en un futuro próximo en la calle", indicó al inicio de las presentaciones Marta Pérez, directora gerente de Valnalón, quien animó a los chavales a seguir en la senda del emprendimiento. "Ojalá en unos años os veamos haciendo declaraciones a los medios de comunicación con vuestras empresas, y recordando que todo empezó aquí", los animó. De momento, se llevan matrícula al ingenio.