San Xuan en estado puro en Mieres, centenares de personas bailan la danza prima alrededor de una foguera tradicional

Ni proyecciones de luz contra la fachada consistorial ni grandes llamaradas artificiales proyectadas al aire para realzar el fuego de San Xuan

La multitud rodea la foguera minutos antes del inicio de la danza prima. | D. M.

La multitud rodea la foguera minutos antes del inicio de la danza prima. | D. M.

Una enorme pila de madera se mantuvo en pie durante todo el día frente al Ayuntamiento. La espigada torre recordó a los más despistados lo majestuoso de la noche que estaba por llegar. A la mayoría de los mierenses no les hizo falta advertencia previa. Durante el corto y expectante día muchos se acercaron a la pira festiva para depositar entre los troncos deseos escritos en papel, ya que la tradición apunta que se cumplen si se dejan arder en el fuego durante la noche más corta y mágica del año. La alegre oscuridad de la madrugada de San Xuan volvió a surgir de las llamas de una foguera que recuperó una compostura muchos más tradicional que en anteriores ocasiones.

Ni proyecciones de luz contra la fachada consistorial ni grandes llamaradas artificiales proyectadas al aire para realzar el fuego de San Xuan. La foguera ardió ayer en Mieres sin parafernalia adicional. Solo llamas y danza prima para hacer entrar en combustión a la ciudad. "A la gente le gusta acercarse a la fuente del Fuerte, que está frente a la hoguera, para coger flores, por lo que hemos prescindido de los dispositivos de llamaradas, que impedían el paso", explicaba ayer César Menéndez, concejal de Festejos.

En Mieres bastaron cuatro metros de hoguera para quemar todo lo malo y atender los deseos de los vecinos. Seguro que les funciona, porque la foguera se encendió, como marca la tradición para que la magia sea efectiva, a medianoche. Centenares de personas se arremolinaron en torno a la luz del fuego para disfrutar del calor nocturno del patrón y bailar, en corro y de la mano, la danza prima. Este año, la popular canción fue cantada por el grupo "L’Artuxu". Se echó en falta la potente voz de José Manuel García, que durante años entonó la danza en Mieres y cuyo reciente fallecimiento consternó a la familia de la canción asturiana.

Los mierenses bailaron alrededor del fuego durante casi una hora. Alguno lo hizo por más tiempo, ya que hay incondicionales que permanecen junto a las fogueras hasta que las brasas prácticamente dejan de calentar: "Venimos con calzado cómodo, ya que al final hacemos varios kilómetros bailando alrededor del fuego", apuntaban José Álvarez y Pilar Suárez poco antes de que la foguera ardiese.

Al cierre de la edición, el fuego de San Xuan ya había hechizado la ciudad, que afrontaba una larga noche de algarabía.