Los pueblos que lindan con la escombrera de Iberdrola en Langreo exigen su cierre

Una comisión vecinal de los pueblos cercanos a la escombrera del Reguerón, adquirido por Hunosa a Iberdrola para su uso como depósito de las cenizas de la térmica de La Pereda, ha manifestado este lunes, en el Ayuntamiento de Langreo, su oposición al proyecto de la hullera y reclaman su clausura.

Los representantes vecinales señalan que «ya dábamos por hecho que la escombrera del Reguerón estaba cerrada, como la Central Térmica de Lada, desde hace 4 años». «Pensamos que se encontraba en proceso de desmantelamiento, que en la instalación estaría en proceso de integración en el entorno natural con planes de regeneración y restauración».

Además, indican que «creíamos que se venía trabajando en esta tarea cuando veíamos estos años actividad en la escombrera y el movimiento de camiones». Sin embargo, «ahora seguimos viendo camiones, pero con toneladas de cenizas».

Los vecinos afectados se sienten afectados por esta actividad de Hunosa en le escombrera y denuncian que se «intenta retorcer la legalidad, sobre todo la ambiental, para mantener una instalación contaminante que va acumulando 100.000 toneladas más de ceniza en un espacio que se encuentra rodeado de pueblos y eso no es caminar en la buena y correcta dirección».

«La vecindad de estos pueblos acogió con satisfacción el cierre de la escombrera y su restauración, concretamente y con más razón los vecinos y vecinas de los pueblos más afectados como El Pandu, con el trasiego constante de camiones de noche y de día, o Les Bories, por la contaminación del polvo de ceniza y la huella que viene dejando en los tejados de las viviendas», explican los portavoz del movimiento, que aseguraron que recabarán «más información», para defender el cierre de la escombrera.