Avilés, A. F.

Pablo Villar, ex portero del Avilés, está entrenándose con el Marino de Luanco después de regresar de Santiago por la desaparición del Compostela, con el que había firmado a finales de julio. «Me fui a Galicia porque el Avilés me dijo que no contaba conmigo y tuve que buscarme la vida. Estaba bien en Santiago, pero los problemas económicos pudieron con el Compos, que desapareció una semana antes de que empezara la Liga y tuve que regresar», explicó.

El jugador avilesino no está contento con el trato que recibió en el Avilés. «En junio, antes de ir al curso nacional de entrenadores a Madrid, me dijeron que seguía y cuando volví, a mediados de julio, que no. Si eso me lo dicen en mayo habría tenido equipos para quedarme en Asturias, pero a esas alturas era imposible. Fue una faena porque quería quedarme en Avilés. Ahora me entreno con el Marino para mantenerme en forma por si sale algo. De lo malo es lo mejor porque en Luanco se entrena casi profesional y a un gran ritmo», comentó.

El portero llegó al Avilés la pasada temporada y empezó de suplente de Javi Riesgo, que fue expulsado en el segundo partido ante el Universidad en el Suárez Puerta y fue sustituido por Dani Roiz, que devolvió a Villar al banco. El portero avilesino jugó seis partidos de titular y tuvo buenas actuaciones.

Villar está entrenando al Bosco juvenil y a los porteros del Quirinal, pero a sus 24 años lo que quiere es jugar. «Cuando volví de Galicia todos los equipos tenían portero, así que me toca esperar».