La empresa estatal dubaití Dewa (Dubai Electricity and Water Authority) ha notificado a la ingeniería asturiana Duro Felguera la resolución del contrato de ampliación de una central eléctrica en Emiratos Árabes Unidos. Ambas partes se reprochan incumplimientos en los plazos y condiciones del contrato. Duro ya había planteado un arbitraje para dirimir las diferencias con su cliente, que ha ejecutado a la compañía asturiana un aval bancario de 47,8 millones de euros.
Duro construye desde 2017 para Dewa el proyecto Jebel Ali Power Station "K" Phase III, un ciclo abierto alimentado por gas de 500 megavatios. El importe de adjudicación superó los 204 millones de euros. Fue el último macrocontrato que logró Duro bajo la presidencia de Ángel del Valle y se consiguió con el aval del Dubai Bank cuando la compañía ya estaba sin apoyo financiero de la banca española debido a sus dificultades económicas.
En ese contexto Dewa y Duro renegociaron plazos y condiciones del contrato y a partir de ahí surgieron las acusaciones de incumplimientos en una obra que está desarrollada en un 55%.
En mayo Dewa ejecutó a la compañía asturiana un aval bancario por valor de 47,8 millones de euros y ahora ha notificado la resolución de contrato con efecto a 1 de julio de 2020 alegando incumplimiento de obligaciones contractuales.
Duro Felguera calificó de "previsible" la decisión de Dewa y señaló que tanto la ejecución de avales como la resolución del contrato "no se ajustan a derecho". La compañía asturiana anunció que pondrá en marcha "todos los mecanismos a su alcance conforme al contrato y las leyes aplicables para proteger sus intereses". En su defensa, Duro señaló que había solicitado "la suspensión de los trabajos en el emplazamiento para prevenir riesgos para la seguridad y salud de los trabajadores derivados de la pandemia de Covid-19 con fecha 22 de abril de 2020 al detectarse casos positivos, pero no se obtuvo respuesta por parte del cliente".
Duro confía en que esta "contingencia no resulte un impacto económico material adicional en su patrimonio" puesto que, según explica, "el importe de la pérdida estimada para ejecutar el proyecto, muy próximo al importe de los avales ejecutados por DEWA, se encontraba provisionado ya en las cuentas del ejercicio 2019".
Esta no es la única disputa que tiene abierta Duro. La compañía anunció ayer que en relación al contrato que suscribió con SPE para la construcción de una central eléctrica de ciclo combinado en Djelfa (Argelia), el Juzgado de Primera Instancia número 11 de Oviedo ha estimado la medida cautelar solicitada por la compañía frente a una hipotética ejecución de los avales de dicho proyecto. Esta medida fue adoptada para proteger los intereses de la sociedad en la negociación que mantiene con su cliente.
Por otro lado, la nueva presidenta no ejecutiva de Duro, Rosa Aza, mantuvo ayer una reunión por videoconferencia con el presidente del Principado, Adrián Barbón.
