El gasto de las autonomías, disparado: cerca del 9% en el caso de Asturias

El retorno a la disciplina presupuestaria no ha sido tal por ahora en las autonomías, Asturias incluida. En el año en que las reglas fiscales (límites de gasto público, déficit y deuda) han vuelto a regir en España tras cuatro años suspendidas (por la pandemia y la guerra de Ucrania), el aumento del gasto de las comunidades se está disparando como media el 6,7%, más que duplicando el techo legal de referencia (2,6%).

La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) refleja en un informe conocido ayer el "riesgo" de que todas las autonomías incumplan en 2024 la denominada "regla de gasto". En base a la información presupuestaria disponible, la Autoridad Fiscal calcula que el incremento de ese gasto –en personal, consumos, prestaciones sociales, inversiones...– oscila entre el 4,2% del País Vasco, la autonomía que menos se aleja del límite, y el 11,2% de Baleares. Asturias presenta la quinta tasa más alta: 8,9% respecto a 2023.

El referido informe relaciona al menos parte de ese mayor gasto asturiano con el crecimiento del relativo a personal, particularmente en la sanidad. En el capítulo inversor, en cambio, la ejecución de los nuevos fondos europeos presenta un nivel inferior al previsto: a fin de año equivaldrá al 0,4% del PIB, frente al 0,9% esperado, vaticina la Airef.

Ante el panorama descrito, la Airef insta al Ministerio de Hacienda a activar un procedimiento de "prevención" que empezaría con una "advertencia" a los gobiernos regionales y continuaría con la obligación de estos de presentar un "plan de medidas" en el plazo de un mes. En caso de no cumplirse esa obligación o de resultar insuficiente el programa de ajustes, entraría en acción un nivel superior de disciplina que obliga a acometer acciones más contundentes a través de los denominados "planes económico-financieros".

Pese al gasto disparado, el Principado tendrá un notable superávit en 2024 (1,1% del PIB), augura también la Autoridad Fiscal. Será así porque los ingresos crecen vivamente (el 15%, en el caso de los procedentes del sistema de financiación autonómica) gracias al aumento de la recaudación tributaria en toda España, favorecida por el crecimiento económico y la inflación. Aun así, la Airef previene a Asturias: "Un elevado crecimiento del gasto (...) implica un deterioro de las finanzas públicas a medio plazo".

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