TURQUÍA-PORTUGAL (0-3)

Portugal barre a Turquía y se apresura para meterse en octavos con Alemania y España

João Cancelo y Bernardo Silva, obra del segundo, celebran el 0-1 de Portugal sobre Turquía.

João Cancelo y Bernardo Silva, obra del segundo, celebran el 0-1 de Portugal sobre Turquía. / Michael Probst / AP

Joan Domènech

Joan Domènech

Después de Alemania y España, Portugal selló el acceso hacia los octavos. La primera selección en clasificarse para la fase final fue la tercera en pasar a las eliminatorias. Por una cuestión solamente temporal. Como sus predecesoras, se ha apuntado los dos triunfos que convierten en irrelevante el tercer encuentro.

Solo tendrá ese compromiso una importancia estadística para alargar la magnífica racha del combinado luso bajo el mandato de Robert Martínez, que enumera 12 triunfos en 12 partidos oficiales, y un total de 15 en 17. Portugal apenas ha caído en sendos amistosos con Eslovenia y Croacia.

Vuela el balón

La victoria sobre Turquía, que perseguía el mismo propósito de blindar la clasificación, fue menos apurada que la inicial ante la República Checa. Aquella se consumó en el último minuto. En Dortmund, Portugal compareció más distendida, el balón voló con precisión y los goles llegaron antes: dos en 28 minutos.

Martínez ha dado carrete a un equipo que tenía mucho fútbol guardado antes de su llegada y que no acababa de desparramar sobre el césped. Un equipo que miraba más el marcador que el balón, cuando la atención sobre el balón permitirá ver un mejor resultado en la mayoría de los casos. El técnico repitió el once del estreno y lo colocó de distinta forma, en un 4-3-3 que le generó mayor comodidad, con Vitinha y Bruno Fernandes de interiores, protegidos por Palinha, y Bernardo Silva y Rafael Leão abriendo las bandas.

Cristiano Ronaldo se presta a una foto con un niño que saltó al césped.

Cristiano Ronaldo se presta a una foto con un niño que saltó al césped. / Christophe Neundorf / Efe

Cánticos de "Arda Güler"

Atronaba el cántico en la grada reclamando la incorporación de “Arda Güler, Arda Güler” en las filas turcas y Cristiano Ronaldo apagó de golpe el clamor. Se escapó el veterano capitán solo, junto con Bruno Fernandes, rompiendo ambos el fuera de juego mal ejecutado, y le regaló el balón a su excompañero del Manchester United, desmintiendo la fama de la presunta mala relación que tenían y la del egoísmo que acompaña al 7 universal. Buscó ansioso todos los remates para batir el récord del goleador más viejo y se relajó con el 2-0, pensando que tendrá dos partidos más. Dos niños y dos individuos saltaron al campo para hacerse una foto él. Solo triunfó el primero.

La vejez se nota más en Cristiano Ronaldo que en Pepe, que amplió el registro de mayor edad que había roto a 41 años y 117 días. Se cruzó con diligencia y rapidez, pletórico Pepe, intuitivo, en dos acciones delicadas cuando aún se discutía el resultado, aunque no fue excesivamente exigido por Yilmaz, el único punta turco que se merendaron entre él y Rúben Dias, ni titubeó cuando le encaró Aktürkoglu, el más atrevido de los turcos.

Dos niños y dos individuos saltaron al campo para hacerse una foto con Cristiano Ronaldo. Solo triunfó el primero.

Bruno Fernandes corre a unirse la piña de celebración del segundo gol.

Bruno Fernandes corre a unirse la piña de celebración del segundo gol. / Miguel A. Lopes / Efe

Con el portero suplente

La inoperancia ofensiva del equipo de Montella llevó a la grada a reclamar a Güler, autor de un golazo en el estreno con Georgia. El técnico italiano había avisado de que podía ser baja por fatiga muscular y le sentó. Cambió también al meta.

Altay Bayindir, el meta suplente del Manchester United, solo ha jugado cinco partidos en toda la temporada. La falta de entendimiento con Samet Akaydin desembocó en un gol en propia puerta del central turco, cuando João Cancelo y Cristiano se habían desentendido de la jugada por el mal pase del defensa azulgrana. El primer gol sí fue bonito: el centro atrasado de Nunes Mendes por la izquierda lo empalmó raso Bernardo Silva con seguridad.

Güler salió a calentar en el primer tiempo, y se entusiasmó la hinchada. No ingresó en el campo hasta el minuto 70, con la derrota consumada. Montella le necesitará fresco en el último encuentro frente a la República Checa.