Nunca es tarde para sacar la ESO: "Nos abre muchas posibilidades"

Medio centenar de estudiantes del Centro de Educación de Personas Adultas celebran su graduación

Los 51 estudiantes de Secundaria que acudieron a la primera graduación del CEPA, en el Centro Municipal Integrado Pumarín-Gijón Sur.

Los 51 estudiantes de Secundaria que acudieron a la primera graduación del CEPA, en el Centro Municipal Integrado Pumarín-Gijón Sur. / Nico Martínez

"Echaré mucho de menos esta casa. Me ha servido para salir, distraerme y aprender muchas cosas de los compañeros y los profesores". Con estas palabras demostró su satisfacción Ana María García, una gijonesa de 63 años que este jueves fue la alumna más mayor de los 51 estudiantes de Secundaria que protagonizaron el primer acto de graduación de la historia del Centro de Educación de Personas Adultas de Gijón, que tuvo lugar en el Centro Municipal Integrado de Pumarín-Gijón Sur. "Es gente que tiene muchas casuísticas y que trabaja y estudia a la vez. Hacen un gran esfuerzo y queríamos recompensárselo", explicó la jefa de estudios del CEPA, Noelia Coya, quien recordó al término del acto que "la educación no tiene fecha de caducidad".

Pese a que en este curso han sido 120 los alumnos que han finalizado con éxito su etapa en el centro, el número de los presentes se vio reducido por las obligaciones laborales y familiares que tienen sus estudiantes. Entre los presentes hubo personas con una amplia variedad de edades. La más joven fue Synthia María Pons, de 20 años, quien no dudó a la hora de señalar que "entrar en el CEPA ha sido la mejor decisión que he tomado". "Vine de Cuba con 18 años y al llegar no podía retomar mis estudios. Aquí encontré una familia porque los compañeros, los profesores y el equipo directivo son espectaculares" , desarrolló Pons.

Por la izquierda, Synthia María Pons y Ana María García, al término del acto de graduación. | Nico Martínez

Por la izquierda, Synthia María Pons y Ana María García, al término del acto de graduación. / Nico Martínez

La graduación, que arrancó a las seis y media de la tarde, tuvo una duración de una hora y en ella destacó la emoción de los propios alumnos y de sus familias, que desde sus butacas no dejaron de aplaudir. Tras la recogida de los diplomas y las bandas, la estudiante Diana Carolina Velásquez representó a sus compañeros sobre el escenario. "Hoy no solo celebramos el final de un capítulo, sino el comienzo de uno nuevo, lleno de retos, obstáculos y oportunidades", expresó Velásquez, antes de añadir que "ahora podemos mirar al futuro con la frente en alto, con la convicción de seguir avanzando"

En el acto también estuvieron presentes la concejala de Hacienda, María Mitre; el director de Juventud y Proyectos Educativos, Carlos Llaca, y, Antonio Reguera, en representación de la Conserjería de Educación del Principado de Asturias.

Suscríbete para seguir leyendo