La tinta y la historia de los videojuegos se lucen desde la primera jornada

Bastó con que el Metrópoli Festival abriera sus puertas para que el público supiera que es una cita que va mucho más allá de la música. Fueron muchos los que ayer aprovecharon para conocer la zona Tattoo, las exposiciones dedicadas a Barbie o a la historia de los videojuegos y el resto de las actividades que iniciaron su actividad este viernes. "Esto hace que se pueda mostrar nuestro trabajo y que así obtengamos más reconocimiento", resaltó Dani Séptimo, al frente de la empresa gijonesa de tatuajes "Séptimo arte", una de las que repite en la caseta habilitada en el recinto ferial para los tatuadores.

"Aquí podemos quitar la impresión de que se vean como algo negativo los tatuajes", desarrolló Séptimo mientras comenzaba a darle forma a la "cara de medusa realista" que Miguel Ángel Vázquez decidió tatuarse.

A su lado, Sara Fuertes veía como en su brazo comenzaban a lucir unos "cristales, unas cartas del tarot, una luna y unas velas" que Paula Rodríguez se encargaba de marcar. "Es mi primer año trabajando aquí y desde el principio está entrando todo el mundo y se está moviendo bastante", comentó Rodríguez.

Otros prefirieron recorrer las exposiciones de Metrópoli. En la de "RetroGames" se encontraban los ovetenses Adrián Ferreiro y Yovana Cuello. "Siempre me interesaron los juegos antiguos porque comencé jugando con consolas más modernas. Es una pasada poder ver las primeras Nintendo o sus chips. Y todavía más poder jugar con ellas", explicó Ferreiro, antes de agregar que "recomendaría a los aficionados de los videojuegos a venir porque es historia pura".

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