Café para una tertulia "reivindicativa, positiva y propositiva"

Un grupo de gijoneses inician encuentros para poner en el foco cuestiones que creen que no están en el debate político

En el sentido de las agujas del reloj, en la mesa, Pedro Roldán, Luis Miguel Piñera, Rubén Medina, Blanca Cañedo y Carmen Moreno. De pie, Yurena Sabio, David Alonso, Rafael Gutiérrez y Geles García, ayer, en el Café Central.

En el sentido de las agujas del reloj, en la mesa, Pedro Roldán, Luis Miguel Piñera, Rubén Medina, Blanca Cañedo y Carmen Moreno. De pie, Yurena Sabio, David Alonso, Rafael Gutiérrez y Geles García, ayer, en el Café Central. / Marcos León

M. C.

"Un café reivindicativo, positivo y propositivo". Así se definieron ayer los integrantes de la tertulia que se estrenó en el Café Central y que irá rotando por otros de la ciudad. "Muchas veces la clase política está alejada de la realidad que vivimos los vecinos", señaló una de las integrantes de este nuevo punto de encuentro, Geles García, exdirectora del Colegio Miguel de Cervantes. Uno de los objetivos de esos encuentros es tratar de poner en el debate público asuntos que consideran relevantes para la ciudadanía. La idea de estas reuniones parte del presidente de la Sociedad Cultural Gijonesa, Pedro Roldán, quien también apuntó que "nos preocupa que da la sensación de que en ocasiones el discurso que se escucha en la Plaza Mayor no es lo mismo que escuchamos en Gaspar García Laviana, en Cuatro Caminos, en La Acerona, en El Llano... y que acaba habiendo discursos diferentes entre la realidad social de la ciudad y el debate que tienen los políticos".

Otros integrantes de la tertulia son el cronista oficial de Gijón, Luis Miguel Piñera; la gerente de la Unión de Comerciantes, Carmen Moreno; la presidenta del Conseyu de la Mocedá, Yurena Sabio; el secretario de organización de CC OO, Rubén Medina; la presidenta de Mar de Niebla, Blanca Cañedo; el presidente de la Asociación de Librerías, Rafael Gutiérrez y el exconcejal y geógrafo, David Alonso. Participan en representación de sí mismos, no de sus organizaciones, se encargó de matizar Medina. La encargada de presentar al grupo fue Moreno: "Somos gente preocupada y comprometida con la ciudad desde ámbitos muy variados. Los que estamos en Gijón empezamos a estar preocupados por algunas cosas. Somos la sociedad civil", señaló. "Hay mucha más sociedad civil fuera, pero todos los que estamos somos", agregó Roldán.

Entre los asuntos que se tocaron este primer encuentro informal, estuvieron las críticas de varios de los integrantes –entre ellos Carmen Moreno y Rubén Medina– a la colocación de una quincena de casetas en el Paseo de Begoña durante la Semana Grande y también a la implantación de proyectos industriales en el Puerto, así como advertencias para que se pongan límites al turismo en la ciudad evitando que a Gijón le acabe pasando lo que "a Málaga o a Palma de Mallorca, que el turismo acabe siendo un lastre para la ciudad", apuntó David Alonso.

Que Gijón siga manteniendo su carácter identitario fue una idea repetida en la charla. "Yo estoy a favor de la diversidad, no del uniformismo, me interesa más que Gijón sea una ciudad con comercio de cercanía, con dueños de Gijón o de Asturias, con trato personal y sello de Gijón que el ver calles que lo mismo puedes ver en Gijón que en Madrid o Milán, con las mismas tiendas y logotipos y mismos dueños que desconocemos", apuntó Luis Miguel Piñera. En el valor diferencial de Gijón también incidió Yurena Sabio a quien le "preocupa bastante que hay veces que hay sitios que ya no lo son, como los centros comerciales". Como ejemplo de pérdida de uno de los elementos singulares de Gijón Blanca Cañedo "el espacio que se perdió con el (teatro) Arango".

Rafael Gutiérrez destacó que el principal activo turístico de Gijón es el carácter de los gijoneses, advirtiendo "que se puede perder si el modelo de turismo va hacia otro lado" con la compra de segundas residencias en la ciudad que eleven el precio de la vivienda para los gijoneses. Respecto al modelo turístico también incidió Pedro Roldán, que indicó que "Gijón tiene una entidad industrial y comercial y el turismo debe ser un complemento, pero no puede ser el eje central de la vida de la ciudad".

Geles García propuso que próximas tertulias se hagan en la calle, idea que fue bien acogida. Serán ahí o en otro café con sello gijonés, pero "en el Starbucks no nos vamos a encontrar nunca, porque no tiene que ver con la ciudad", apuntó Moreno en el encuentro en el que ha visto la luz una nueva tertulia al calor de un café.