La mayoría de las fuentes de Gijón presentan bacterias en el agua, revela un estudio

Medio Ambiente comienza a instalar placas donde no había para advertir a los ciudadanos

La fuente de La Pontona, en Cenero, con la placa ya colocada.

La fuente de La Pontona, en Cenero, con la placa ya colocada.

Francisca Balbontín

El área municipal de Medio Ambiente acaba de terminar una campaña pionera para el control de las fuentes del concejo, y la calidad del agua de las mismas, que ha llevado a revisar desde el pasado año hasta 160 elementos. El estudio que ha llevado a cabo el servicio de Vigilancia y Calidad Ambiental ha revelado la presencia de bacterias enterococos intestinales y e-coli en la gran mayoría de fuentes, lo que ha llevado al Ayuntamiento a colocar una treintena de placas, donde no existían con anterioridad, para advertir a la población de que el agua de esos surtidores no cumple con las garantías sanitarias establecidas por la norma. "Nuestra prioridad sigue siendo el cuidado máximo de la salud de los gijoneses. Hay que recordar que esta es la primera vez que se realiza un estudio de estas características en las fuentes del concejo y, con esos datos, estamos obligados a informar a la población de que si el agua tiene garantías suficientes o no para el consumo humano", explica el concejal popular Rodrigo Pintueles.

El estudio, comenzó a realizarse tomando muestras en cada una de las 160 fuentes del concejo, se fundamenta en los criterios técnicos sanitarios de la calidad de las aguas de consumo, su control y suministro establecidos en el Real Decreto 3/2023 del 10 de enero. Estos parámetros indican que el agua de esas fuentes no es potable en la mayoría de casos por la presencia de enterococos intestinales y e-coli.

Las placas de metal instaladas por el Ayuntamiento de Gijón llevan la advertencia "Agua sin garantía sanitaria". Está previsto que todas las fuentes con resultados negativos de los análisis luzcan esta advertencia para los ciudadanos.