Todo listo en Gijón para vibrar con España en la final de la Eurocopa: pantalla gigante, sorteo de entradas, música y aforo para 12.000 personas

Hasta 12.000 personas tendrán la posibilidad de disfrutar en el parque de los Hermanos Castro de la final de la Eurocopa que enfrentará a las selecciones de fútbol de España e Inglaterra mañana a las 21.00 horas. En ese lugar, como desveló el Ayuntamiento tras la victoria de la selección en semifinales frente a Francia, se instalará una pantalla gigante, de 48 metros cuadrados.

La apertura de puertas de la "fan zone" tendrá lugar a las 17.00 horas, y será a partir de las seis de la tarde cuando arrancará la actividad de esta cita. Con la finalidad de animar la tarde, habrá espacio para los ritmos musicales que ofrecerán los DJs, así como para sorteos de entradas para los festivales Boombastic, Tsunami y Gijón Life. Asimismo, aseguran desde el Ayuntamiento, quienes acudan al parque de los Hermanos Castro se encontrarán con "otras muchas más sorpresas". Este espacio, al que podrán acceder 12.000 asistentes, contará con control de accesos, seguridad privada y servicio de bar. "Gijón tiene que ser una fiesta para animar a nuestra selección", señaló el portavoz del gobierno local, Jesús Martínez Salvador, después de que España se impusiera a Francia el pasado martes gracias a los tantos de Lamine Yamal y Dani Olmo. El Ayuntamiento, además, dio autorización para instalar televisiones con sonido en las terrazas hosteleras.

Más allá de esta posibilidad que ofrecen el Ayuntamiento de Gijón y el ciclo de conciertos Gijón Life, quienes acudan a los terrenos de los antiguos astilleros de Naval Gijón en la jornada que servirá para culminar la 37.ª edición de la Semana Negra podrán ver la final de la Eurocopa en la Carpa del Encuentro. Desde una hora antes del partido, el certamen literario proyectará la señal de los prolegómenos del choque que mantendrá en vilo a todo el país.

Quejas de Otea

La decisión del Ayuntamiento de instalar una pantalla gigante se ha encontrado con las críticas del sector hostelero. "Esta instalación perjudica claramente a los negocios de hosteleria porque resta, evidentemente, clientes a los establecimientos de hostelerÍa y se favorece además el botellón y el consumo de bebidas en la calle", señalaron ayer desde Otea.