El Puerto Deportivo de Gijón luce la bandera azul como "símbolo de compromiso" con el medio ambiente

"Es la recompensa al trabajo de todo el año". Flor Guardado, la directora del Puerto Deportivo de Gijón, se expresó ayer de esta manera durante el breve acto protocolario que precedió al izado de la bandera azul en el espigón al pie de la Antigua Rula. Una bandera azul que ya luce al pie de las oficinas del puerto, en la zona por donde acceden y salen las embarcaciones al Cantábrico. Lo hace como símbolo del "compromiso" con el "medio ambiente y la sostenibilidad" de la instalación gijonesa que un año más, y ya van 27, presume del importante distintivo concedido por la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac). La ceremonia de ayer, discreta pero elegante, reunió en la zona próxima al mástil donde luce la bandera a las autoridades militares y civiles que tienen relación con el mar en la ciudad.

El Puerto Deportivo de Gijón es la única institución de este tipo en el norte de España que ha conseguido este año el galardón. Es una de las 16 banderas que este año han llegado a Asturias, el resto en playas. Cabe recordar, no obstante, que el Club Natación Santa Olaya se llevó una mención especial por su proyecto "Swimsafe". Flor Guardado fue la primera en tomar la palabra en los prolegómenos del izado de la bandera. Junto a ella estuvo Miguel Vallina, director de Planificación de la Autoridad Portuaria de Gijón, así como por el comandante naval de Gijón, el capitán de navío Luis Vicente Márquez Montero, y la concejala de Seguridad Ciudadana, la forista Nuria Bravo. "Para nosotros este es un evento entrañable porque reunimos a las entidades civiles y militares que tienen relación con el mar y con las que trabajamos codo con codo para la protección a la hora de la entrada de barcos. Tenemos unos mil clientes en tránsito al año", destacó la directora del Puerto Deportivo.

Así fue el izado de la bander azul en el puerto deportivo de Gijón (en imágenes)

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Tras ella, tomó la palabra Miguel Vallina, que ligó la concesión de la bandera azul de la Adeac a la culminación del proceso de recuperación de lo que es la lámina de agua del muelle de Fomento tras el traslado del puerto comercial de Gijón, allá por 1907, a la zona de El Musel. "Los puertos se adaptan a la logística de los buques, cada vez de más tamaño, y vamos dejando atrás mucho edificio obsoleto y necesitamos infraestructuras diferentes. Gijón no ha sido ajeno a ello ya que esto antaño era el puerto comercial", recordó en referencia a lo que ahora es el puerto deportivo. "Dejamos este espacio en 1907, la fecha en la que se inauguró El Musel, y este lugar en 1980 era una zona residual y degradada, con apenas un poco de pesca y unos cuantos buques abandonados", señaló ayer Miguel Vallina.

"Hicimos un proyecto increíble con el Ayuntamiento e iniciamos un proceso de recuperación, entre 1986 y 1992, que ha culminado en esto. En lo que es hoy la zona, con espacios para el paseo y parkings y la Antigua Rula", recordó el representante del Puerto. "El proceso sigue vivo y la bandera azul mantiene con la ilusión de seguir trabajando en Gijón. No es un reconocimiento, sino una garantía. Es una garantía para nosotros y para los que nos visitan de que estamos haciendo las cosas con compromiso con el medio ambiente y con la sostenibilidad", insistió Vallina, que añadió que «había que agradecer» la labor realizada por todo el equipo de la instalación gijonesa, dependiente de la Autoridad Portuaria.

Último izado de Márquez

El acto de izado también tuvo un momento emotivo cuando tomó la palabra el comandante Naval de Gijón, Luis Vicente Márquez. Más que nada porque avanzó que de cara a julio del año que viene habrá un nuevo mando que ocupe su puesto. Le llamó para participar Guardado. "Quiero que nos acompañe porque para él es un día especial. Nunca se puede decir que vaya a ser la última, así que esperemos que sea la penúltima y que otro año nos acompañe, aunque sea de paisano", comentó la directora de la institución en referencia a la salida de Márquez Montero. El capitán de navío, vestido con su uniforme blanco, le tomó el guante y confirmó su salida en los próximos meses. "Todavía me queda mucho, pero sí, es probable que en julio del año que viene vaya a haber otro comandante. Si bien, para eso queda mucha mar por la proa", dijo.

Respecto al izado de la bandera azul, el comandante Naval se mostró en la misma línea que el resto de los protagonistas. "Me uno a la felicitación del puerto deportivo con este galardón que distingue tan visiblemente el cuidado, la protección y el amor por el medio ambiente marino", afirmó el militar. "Aquí no solo se hace compatible la sostenibilidad con la actividad empresarial, sino que además se hace con mucho mérito", prosiguió Márquez Montero, que finalizó su breve intervención simplemente reiterando su enhorabuena y remachando su discurso diciendo que el puerto deportivo "nos tiene mal acostumbrados" en relación a la cantidad de veces que ha logrado ya la bandera azul.

Además de los citados, en el acto hubo una nutrida representación de autoridades civiles y militares. Estuvieron, entre otros, Pablo Ferrío, jefe del servicio de Bomberos; el teniente Vicente Montiel del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, el comisario de la Policía Nacional, Fermín Treceño; Indalencio Estrada, director del CIFP del Mar; el presidente de Cruz Roja de Gijón, Monchu González; el decano de la Escuela de Marina Civil, Rubén González y el director del Centro Oceanográfico, Rafael González Quirós.