La residencia de estudiantes "va bien", defiende el Rector

"El doble uso nos permitirá sacar adelante la licitación", defiende Ignacio Villaverde

Ignacio Villaverde, en una imagen de archivo.

Ignacio Villaverde, en una imagen de archivo. / Mario Canteli

A. V. / S. G.

"Va bien". En esos términos se refirió ayer Ignacio Villaverde, rector de la Universidad de Oviedo, al proyecto de la residencia de estudiantes a construir en el campus de Gijón. "Ya hemos concluido la relación de la propuesta de plan especial", sostuvo Villaverde. Desde el punto de vista municipal, el Ayuntamiento ya aprobó la realización de cambios en el Plan General de Ordenación (PGO) para que la residencia pueda albergar también usos hoteleros durante los meses de escasa ocupación estudiantil. Esa modificación del PGO se encuentra en tramitación.

"Ese doble uso entendemos que nos permitirá por fin sacar adelante la licitación", prosiguió Ignacio Villaverde, que ensalzó que el Consistorio gijonés está "muy comprometido" con el proyecto. "Nos ha asegurado que le va a dar la máxima prioridad", indicó el rector de la Universidad de Oviedo, que confía en que esta ocasión sea la definitiva para impulsar una actuación largamente anhelada. "En el momento en que esté aprobado el plan especial, la licitación ya la tenemos lista para sacarla. Esperamos no tener una crisis energética o de materias primas", señaló Villaverde. En verano de 2022, el rector aseveró que tocaba rehacer el proyecto porque "las cifras no cuadraban" debido a las consecuencias de la invasión rusa de Ucrania.

En el ajuste del PGO, se aportaba fijar la posibilidad de reajustar la envolvente de la residencia de estudiantes y de, además del polideportivo, hacer otros edificios de usos universitarios en el espacio que delimitan las calles Blasco de Garay, Pedro Puig Adam y Pedro de Lucuze y Ponce. El último proyecto para la residencia fue el primero liderado por la Universidad. Se planteaba un complejo con tres edificios, dos para habitaciones y uno de usos múltiples, con capacidad para 210 estudiantes y zonas verdes. La espera por el equipamiento dura ya más de una década, ya que antaño hubo planes impulsados por empresas. Ahora, Ignacio Villaverde es optimista. "Parece que esta vez va para adelante", sentenció.