Vuelta al pasado

La novedad de este año es colocar aguaduchos efímeros en Begoña con abundancia de terrazas. ¡Menuda cosa nueva!: multitud de villas y ciudades lo hacen en sus fiestas señaladas; es como si llamáramos novedad a los mercadillos navideños o de fin de semana. El caso es que no había tal cosa por aquí hasta ahora y este año brotarán como hongos y con abundancia. Ahí está el gremio chigrero, comandado por su asociación Otea para presionar y hacer lobby. Pero los que se pongan no lo harán completamente a su riesgo y ventura: Divertia les paga la luz, el agua y alguna cosita más a los hosteleros agraciados con una de las. Esto es algo más que el colmo y ya estuvo bien. Es insoportable la parcialidad del concejal tránsfuga al llevar los circenses de la localidad al terreno del favorecimiento de una asociación de lo que da la sensación son sus apreciados amiguetes.

Pongamos un ejemplo de la voracidad hostelera: la pantalla gigante del pasado domingo en parque de los Hermanos Castro para que la afición viera la final que tan bien finalizó del campeonato de Europa de fútbol. Con toda su cara dura, los de Otea protestaron a la voz de "esta instalación perjudica claramente a los negocios de hostelería porque resta, evidentemente, clientes a los establecimientos de hostelería y se favorece además el botellón y el consumo de bebidas en la calle". Hace falta tener morro y ser insaciables y un sin parar de sus quejas, lloros, exigencias, peticiones, protestas y lamentos. Los de Otea están a punto de traspasar una línea roja con su avidez. Es como si desearan que toda la ciudad fuera sólo para ellos.

Hubo el otro día un acto de los que se dicen de lujo en el edificio de la Tabacalera en el barrio alto y allí presentó su futuro. En esencia y gran parte de su desarrollo, el "nuevo" proyecto de Tabacalera tiene quince años, a pesar de que la primera autoridad nos lo haya pretendido vender como la novedosa "vía gijonesa" hacia la cultura. Personas con memoria ya han puesto las cartas sobre la mesa y recordado que la condenada cirujana, en su primer mandato, mandó a paseo el plan que había dejado ya avanzado su antecesora Fernández Felgueroso, pero aquello tenía el marchamo de ser socialista. Inventó otra cosa y comenzó a hablarse de instalación cultural. La pasada semana, con toda su cara dura, presentó un desarrollo del plan que la administración socialista dejó avanzado en 2011. Ahora, con unos plazos bastante dilatados en el tiempo, volvemos a lo de antes. Así son estos de Foro: ni una idea nueva, a no ser que sean toros y bares.

Suscríbete para seguir leyendo