Entrevista | Pablo Rodríguez Menéndez Secretario general de las Juventudes Socialistas de Grado

Pablo Rodríguez: "Es esencial que nos dirijamos a los jóvenes, porque conocemos y compartimos realidades y problemas”

"Hay dos motivos principales para la desafección política: una baja credibilidad y una ausencia injustificada de referentes jóvenes en el debate público" 

Pablo Rodríguez, en Grado.

Pablo Rodríguez, en Grado. / Á. R.

Ángela Rodríguez

Secretario general de la primera agrupación de Juventudes Socialistas en Grado, creada en septiembre de 2022, Pablo Rodríguez Menéndez (Grado, 1998) es una persona implicada. En la mayor amplitud del término. En los últimos comicios concurrió como número tres de la candidatura socialista al Ayuntamiento moscón y como número cuatro en las listas autonómicas por la circunscripción occidental a la Junta General del Principado de Asturias. Graduado en Derecho por la Universidad de Oviedo, cursó después el máster en Relaciones Laborales en la Universidad de Salamanca. Durante muchos años practicó hockey sobre patines inspirado por su abuelo, el histórico Claudio Menéndez de la Riera. 

-¿Cómo surgió la idea de crear el grupo de Juventudes Socialistas en Grado?

-Fue uno de los objetivos principales que se marcó desde la ejecutiva del PSOE que salió elegida en 2022 para poder contar con una organización distinta e independiente de la agrupación municipal que diera voz y pusiese de manifiesto los problemas de la juventud, no solo moscona sino de toda la comarca. Las Juventudes Socialistas de Grado nacieron con la idea de incorporar, debido a la inexistencia de otras agrupaciones políticas en la comarca, a todos aquellos jóvenes que tengan necesidades e inquietudes y quieran trabajar para solucionarlas.

-¿Cuáles cree que son los principales motivos de desafección política entre los jóvenes?

-Hay dos motivos principales. Por un lado, una baja credibilidad de nuestros políticos como consecuencia de una situación política actual enrarecida, beligerante, poco constructiva, que se suma a una ausencia, en mi opinión injustificada, de referentes jóvenes en el debate público.

-¿Cuáles son, entonces, las principales herramientas para revertir esa situación?

-Conseguir una política constructiva y un apaciguamiento de la situación actual creo que, a corto plazo, es tarea difícil. Lo principal, y es mi consejo, es que los jóvenes no conciban que la política es solo aquello que leen o escuchan en las redes y en los medios de comunicación. La política no es una confrontación continua donde reina el "y tú más", por mucho que actualmente parezca serlo. La política es muchísimo más. Desde que nos levantamos ya estamos haciendo política. Cuando cogemos el transporte público para ir a clase y queremos que llegue puntual y que el billete sea a un precio asequible. Cuando disfrutamos de una beca que nos permite estudiar aquello que queremos. El salario que percibimos después de una jornada de trabajo. Cuando pensamos en independizarnos. Cuando nos ponemos enfermos y queremos disfrutar de una sanidad pública y de calidad. Cuando nos expresamos libremente, cuando amamos a quien queremos o cuando reivindicamos igualdad. Todo eso, es política.

-¿Qué actividades se están promoviendo desde las juventudes?

-Tenemos una participación activa tanto con las Juventudes Socialistas de Asturias como con la Agrupación Socialista de Grado. Pero hacemos total autocrítica. Nos gustaría hacer muchísimo más. Para ello, necesitamos participación. Las agrupaciones necesitan personas, debates, conocer los problemas e intentar darles solución. La participación no conlleva un "contrato laboral". Cada uno debe aportar cómo y cuando pueda. Lo importante es estar ahí. Formar parte de un grupo que lo único que pretende es dar a conocer nuestros problemas y exigir soluciones. Todos los jóvenes tenemos inquietudes, algo que no nos gusta, algo que necesitamos. Vivienda, transporte, educación, trabajo, ocio etcétera. Escucharnos es importantísimo. Y las juventudes socialistas estamos ahí para ello.

-¿Tiene la sensación de que los partidos, y en concreto el suyo, escuchan suficientemente a los jóvenes?

-Creo que todos los partidos deberían tenernos más presentes. Escuchar es sencillo, lo importante es que cuenten con nosotros. Que nos hagan partícipes. El relevo generacional no solo es inevitable, sino que es sano y necesario. Hay que saber dejar paso. Siempre me gusta reivindicar la participación de los jóvenes en la política. Considero que, si bien tenemos mucho que aprender, y estamos dispuestos a ello, también tenemos muchísimo que aportar. Es esencial que los jóvenes nos dirijamos a los jóvenes. Conocemos y compartimos realidades, necesidades y problemas.

-¿Cuál cree que es la clave para la salud de una agrupación política? 

-Creo que la clave está en la participación y en la escucha activa. Una agrupación política debe escuchar y escucharse, tanto para lo bueno como para lo malo. Debe escucharse a sí misma, aceptar las críticas y aprender de ellas. Las agrupaciones políticas las conformamos varias voces y todas deben ser escuchadas. Todas las voces son igual de importantes. Al final, como siempre me gusta recalcar, las personas vamos pasando, pero las agrupaciones continúan y de nuestro comportamiento, de nuestra predisposición a la escucha interna depende la salud futura de la agrupación. Y lo más importante, debe escuchar activamente a toda la sociedad, a la que representa y también a la que no. Es el fin de toda agrupación política, su razón de ser. Las agrupaciones no pueden desconectar de la ciudadanía, todo lo contrario, tienen que involucrarla, hacerla partícipe. Tienen que conocer y reconocer sus problemas, inquietudes y necesidades, y trabajar para darles solución.

-¿Cómo es la relación con otros colectivos de jóvenes en la comarca?

-Por desgracia, somos la única agrupación política juvenil de la comarca. Nos encantaría que hubiese más. Nos gusta siempre animar a todos los jóvenes que se involucren, sea cual sea su ideología. La política es mucho más que la confrontación. Es intentar mejorar la vida de tus vecinos, de tus amigos, de tu familia. Es luchar por revitalizar nuestro concejo y toda la comarca. Es analizar y observar los problemas y las necesidades que tenemos e intentar cambiarlas.

-¿Cuáles son algunas de esas problemáticas que detecta en Grado?

-Es importante recalcar que las Juventudes, si bien, como objetivo principal tenemos la defensa de los intereses de los jóvenes, no somos ajenos a todo lo demás. Somos conscientes y también trabajamos por dar solución a los diferentes problemas de la sociedad. Defendemos y luchamos por todo aquello que mejore la vida de la gente. Somos muy conscientes también de los problemas que hay en nuestro concejo, de la falta de limpieza de muchas de nuestras calles, la necesidad de relanzar y potenciar nuestro mercado, la reparación de caminos rurales o la falta de oportunidades laborales. Nuestro propósito es conseguir que Grado sea un lugar con mayor y mejor calidad de vida, ya no solo para que los que queramos quedarnos podamos hacerlo, sino para que otros quieran establecerse aquí.