Un arcoíris desde el faro de Tapia al de Avilés: el diseño de la Autoridad Portuaria avilesina que no deja indiferente

El histórico edificio tapiego afronta la fase final de las obras para convertirse en una residencia pública de artistas

El faro de Tapia de Casariego, en obras.

El faro de Tapia de Casariego, en obras. / T. C.

Ana M. Serrano

Ana M. Serrano

La rehabilitación del faro de Tapia de Casariego para convertirlo en residencia de artistas culminará el próximo agosto y trae sorpresa: la cúpula ya luce de color magenta. Según explican desde la Autoridad Portuaria de Avilés «el llamativo color de la cúpula no solo tienen una función decorativa sino de seguridad, ya que aumenta la visibilidad diurna del faro». Además, existe un fin estético porque se persigue «sembrar un arcoíris de colores desde el faro de Tapia al faro de Avilés». «Así, el faro de Vidio tiene una cúpula amarilla, el faro de Cudillero tiene una cúpula naranja y ahora le ha tocado el turno al faro de Tapia», desvelan las mismas fuentes. 

A preguntas de LA NUEVA ESPAÑA, la Autoridad Portuaria de Avilés confirma por lo demás que el trabajos se encuentran «en un estado avanzado y cercano a su finalización, ya que solo queda por ejecutarse los últimos remates que atañen principalmente a la carpintería exterior del edificio y su urbanización». En concreto, añaden, estos días «se está trabajando en el camino de subida al edificio del faro».

La rehabilitación del edificio del faro supone un antes y un después para esta instalación del siglo XIX hasta la fecha cerrada al público y en desuso. En un futuro próximo serán los artistas, previa selección hecha por el Principado, los que podrán habitar estas históricas y llamativas instalaciones. El faro conservará en todo caso su función naútica, mecanizada y dependiente, al margen de la actividad del edificio anexo, de la Autoridad Portuaria de Avilés. 

La cúpula del faro, de color magenta.

La cúpula del faro, de color magenta. / T. C.

La inversión de este ente supera el millón de euros. Por su parte, el Principado se hará cargo de la gestión. Se sabe que este espacio será la sede de residencias temporales de artistas asturianos y llegados de otros puntos de España y del extranjero, al promoverse «intercambios con entidades y equipamientos similares de otros lugares del mundo», según el gobierno regional.

El proyecto de obra presenta seis habitaciones, una cocina-comedor «que funcionará también como lugar de encuentro» y reunión, una biblioteca, una sala de música insonorizada y un taller de artes plásticas. Según el diseño arquitectónico, el patio tendrá un protagonismo especial al ser el centro donde convergen todas las estancias y un futuro lugar de encuentro para los artistas y el público. De hecho, no se descarta que esta zona se utilice para organizar actividades relacionadas con las propuestas creativas de los artistas invitados a pasar las estancias. 

El Alcalde de Tapia de Casariego, Pedro Fernández, destaca, por su parte, que esperan una reunión formal o pública para conocer cómo funcionará en el futuro este equipamento histórico tapìego que data de 1863.