Los pueblos de Somiedo se engalanan por San Juan y recuperan la tradición de enramar sus fuentes

Los elementos etnográficos vinculados al agua de 21 localidades somedanas lucen estos días adornados con el objetivo de animar a visitarlos y de recuperar antiguas costumbres

Los pueblos de Somiedo lucen estos días más bonitos aún si cabe que de costumbre. El motivo es que, por San Juan, los vecinos, animados por la Asociación de Hostelería y Servicios Turísticos somedana recuperan la tradición de enramar los bienes etnográficos vinculados al agua. Así, pasear estos días por los núcleos de Somiedo es descubrir el ingenio de sus vecinos adornando sus fuentes, lavaderos y otros elementos, en los que se puede ver mayoritariamente ornamentación floral, pero no solo, ya que muchos incluyen otras decoraciones como cestas con frutas y frutos secos, objetos domésticos de antaño utilizados ahora para adornar e incluso muñecos.

La iniciativa de engalanar con ramos los lugares vinculados al agua está en su quinta edición y quiere recuperar una tradición que se practicaba en los pueblos del municipio hasta hace 60 años. Una costumbre que buscaba honrar al agua durante la noche más corta del año, la de San Juan, unida desde tiempos inmemoriales a multitud de rituales.

Enramado de la fuente de Valcárcel.

Enramado de la fuente de Valcárcel. / Reproducción de D. Á.

“En esta edición participan 21 pueblos, vamos creciendo año a año, solo hay cinco que no han participado todavía”, explica Rosalía Garrido, presidenta de la asociación e impulsora de la propuesta, con la que además de recuperar la tradición explica que se busca que los pueblos luzcan cuidados y bonitos, siendo un motivo más para atraer visitantes que se acerquen a las distintas poblaciones. Una excusa para invitar a conocer los distintos pueblos y lugares participantes: Éndriga, Arbellales, Saliencia, Fuente de La Farrapona, La Bustariega, Las Viñas, La Riera, Valcárcel, Santiago del Hermo, Urria, El Coto de la Buena Madre, Valle de Lago, Pola, Aguino, Perlunes, Pigüeña, Santullano, Villar de Vildas, La Rebollada, Fuente del Ecomuseo de Caunedo y Santa María del Puerto.

Además, en muchos de ellos se pueden encontrar no solo una, sino varias fuentes y otras construcciones adornadas como lavaderos, pozos, molinos, bogadeiros y ol.leras.

Todo este trabajo forma parte de un concurso en el que un jurado elige las mejores propuestas decorativas. Esta misma semana se reunirá para elegir a los pueblos merecedores de ser destacados por su esfuerzo para engalanarse por San Juan. La recompensa es formar parte de la revista que edita la Asociación de Hostelería y se premiará, por un lado, al pueblo que presente más bienes enramados, que tendrá el honor de poder lucirlos en la página central de la publicación. Por otro, se premiará al participante individual que mejor trabajo haya hecho, que ocupará la portada. Por último, se buscará el bien etnográfico más destacado, que será el que ilustre la contraportada.