El Ayuntamiento de Allande recibe la donación de un edificio que convertirá en albergue municipal

La casa de la familia allandesa Blanco Olalla tiene tres plantas y exterior restaurado: "Si sirve para el pueblo, encantados"

Por la izquierda, Luscinda Blanco, la notaria Miryan Calzón, Mariví López y el edil Aniceto "Tito" Álvarez, en la notaría.

Por la izquierda, Luscinda Blanco, la notaria Miryan Calzón, Mariví López y el edil Aniceto "Tito" Álvarez, en la notaría. / D. Álvarez

La cesión del edificio de la familia Blanco Olalla de Pola de Allande al Ayuntamiento se ha materializado este jueves con la firma ante notario. Luscinda Blanco Olalla, heredera junto a su hermano Elías, del edificio firmó el documento junto a la alcaldesa, Mariví López, que hace que el edifico ya pase a ser oficialmente un bien municipal, cuyo destino será el de convertirse en el nuevo albergue público.

El edificio, de tres plantas, está situado en la calle Mayor de la capital allandesa y tiene su exterior totalmente restaurado. La familia quería reformarlo para crear tres viviendas, pero finalmente la intervención en el interior de la casa no llegó a realizarse.

Para los hermanos Blanco Olalla, la construcción es muy importante por el significado que tenía para su madre. "Allí nació mi abuelo materno y aunque mi mami ya nació en Santo Domingo, siempre tuvo mucho apego a Pola y veníamos a pasar aquí los veranos, para ella la casa era muy importante, así que fue comprando las partes a sus primos hasta que se quedó con ella", explica Luscinda Blanco Olalla.

Ese amor por la casa donde nació su padre, que Luscinda Olalla Cabral transmitió a sus hijos, ha hecho que ellos decidieran buscarle un futuro para asegurar su conservación y pensaron en la donación a la administración local: "Lo que queremos es que se pueda mantener la estructura y si sirve para algo para el pueblo, nosotros encantados".

Una donación que realizan en memoria de su madre y que, por ello, el futuro albergue municipal se bautizará con su nombre.

El proceso llega a su fin después de un año de trámites. Ahora el Ayuntamiento de Allande espera recibir la subvención que ha pedido a la convocatoria de ayudas para la Transición Justa para convertir el edificio en un albergue de unas 25 plazas, accesible y con múltiples servicios para la comodidad de los peregrinos.