El turismo del Oriente puede "morir de éxito", alertan los munícipes

La movilidad, el relevo generacional o la escasez de vivienda monopolizan un debate entre representantes políticos de la comarca en Cangas de Onís

Desde la izquierda, José Manuel Cuervo y José Luis Somoano, exalcaldes de Cangas del Narcea; Fernando Díaz-Caneja, exalcalde de Onís, y Francisco González, exregidor de Cudillero.

Desde la izquierda, José Manuel Cuervo y José Luis Somoano, exalcaldes de Cangas del Narcea; Fernando Díaz-Caneja, exalcalde de Onís, y Francisco González, exregidor de Cudillero. / J. Quince

J. Quince

El Oriente de Asturias destaca por la convivencia entre su exitoso modelo turístico que, desde los años 80, atrae a numerosos visitantes cada año, y el desarrollo y supervivencia del sector primario. Sin embargo, ambas realidades se enfrentan a innumerables retos que es necesario atajar desde las administraciones para evitar que la ganadería y la agricultura desaparezcan y que el turismo con sello propio «muera de éxito».

De «Agroalimentación y Turismo» se habló ayer en Cangas de Onís, en un acto organizado por la Asociación de Ex Alcaldes y Ex Alcaldesas de Asturias (AEX). Unos diálogos que contaron con cuatro ponentes de prestigio vinculados a la comarca, al servicio público y al medio rural: Begoña López, directora general de Agricultura, Agroganadería y Desarrollo Rural; José Manuel González Castro, alcalde de Cangas de Onís; Antonio Trevín, expresidente del Principado y exalcalde de Llanes; y José Manuel Fernández Díaz, alcalde de Peñamellera Baja y senador.

Entre los principales retos y deficiencias que los ponentes destacaron en el debate no faltaron la movilidad, el reto demográfico, el relevo generacional y la vivienda. Todos estos asuntos son «fundamentales» para sostener la viabilidad de un turismo sostenible y de calidad, pero también para facilitar la vida de los vecinos, a juicio de los participantes.

Precisamente en Cangas de Onís existe actualmente más plazas hosteleras que habitantes en el concejo: «El reto está en conservar el turismo, pero también hacer un diagnóstico y ponernos en manos de profesionales para saber qué está pasando y cómo gestionarlo», señaló su alcalde. Una situación que se repite no solo ya en temporada alta, sino en muchos otros meses del año en toda la comarca.

Si hasta hace unos años uno de los retos era la desestacionalización, ahora el foco está puesto en la regulación del turismo y en la movilidad, entre otros asuntos: «No podemos dar imagen de villas incómodas. Ahora mismo, la gente viene, no encuentra donde aparcar y se va. Hay que ordenar los espacios urbanos igual que se hizo con los espacios naturales», subrayó Trevín.

Por otro lado, y con respecto al primer sector, se pronunció de manera muy clara la directora de Agroganadería: «Debemos ponerlo en valor aún más si cabe, prestigiarlo, buscar un equilibrio en la convivencia con la fauna y diferenciarnos de otras regiones», apuntó.

Por su parte, José Manuel Fernández apuntó a la falta de relevo generacional y el reto demográfico, para lo que es necesario atender, dijo, a la política fiscal de los municipios pequeños: «Parece que nos hemos acomodado y necesitamos otra revolución», concretó. Unido a este problema se encuentra el del déficit de vivienda, tanto por el encarecimiento como por la afloración de pisos turísticos y la falta de oferta pública.

Con todo, los cuatro intervinientes concuerdan en que el Oriente no ha tocado techo: «Tiene futuro». Para ello, apuestan por el trabajo conjunto entre administraciones.

Por otra parte, la AEX aprovechó el acto de ayer para rendir ayer un cariñoso homenaje a dos de los alcaldes que ejercieron el poder local durante el primer mandato de la democracia y que no pudieron estar presentes en el acto conmemorativo celebrado el pasado 3 de abril en Lugones. Se trata de José Luis Somoano, exregidor del concejo de Cangas del Narcea y Fernando Díaz-Caneja, quien estuvo al frente del Ayuntamiento de Onís, a quienes se les hizo entrega de una estatuilla de la Casa Consistorial de Yernes y Tameza, el municipio con menor población de Asturias.

Unas horas antes, recibieron también este reconocimiento al exalcalde de Caravia, Manuel García Rivero, y tienen previsto hacer lo propio con Juan Antonio Ureta, exalcalde de Ribadesella, y Francisco Javier Fernández Casielles, exalcalde de Pravia.