La operación de los Palacios no fue "una confabulación judeo-masónica" ni un "pacto con el diablo", sino una "colaboración público-privada" que, de no haber sido por la crisis, habría permitido que Oviedo tuviera hoy "un magnífico Palacio de Congresos y Exposiciones por un reducido coste" que seguiría gestionando Jovellanos XXI.

Agustín Iglesias Caunedo quiso dejar claro ayer, después del ataque frontal del tripartito al confirmarse la sentencia por la que el Ayuntamiento tendrá que pagar casi 20 millones de euros por el Palacio de Congresos de Calatrava, que "la verdad de la historia" es que el edificio "estaba pagado con los aprovechamientos urbanísticos, aunque la justicia considera que hay una diferencia de 18 millones".

Caunedo lamenta que los tribunales no coincidan con su opinión y la de los técnicos municipales e insiste en que "si Jovellanos XXI hubiese explotado la concesión hasta el final, no estaríamos hablando de esto".

Ante la situación que ha metido esta nueva deuda a las arcas municipales, el presidente del PP de Oviedo deja caer la idea de que es necesaria una reforma en la legislación nacional para que el riesgo y ventura de las empresas no acabe repercutiendo en lo público. "Algo hay que replantearse en España", explica, "cuando ante un incumplimiento de las empresas concesionarias, el coste debe ser asumido por la administración". Es lo que ha sucedido en Oviedo, sigue, pero "no solo en Oviedo, como le interesa hacer ver al actual equipo de gobierno, y ahí está el ejemplo de la AP-7, donde las previsiones y planificación previa, con el paso de los años, tampoco se ajustan a la realidad".

Iglesias Caunedo también recalca y rebate las acusaciones del tripartito cuando señalan una trama detrás de la operación de los palacios. "Lo que no se puede ni debe concluir de todo esto", argumenta, " es que ni fue una confabulación para engañar a nadie, ni que los empresarios asturianos son unos criminales, como se deja entrever en las declaraciones de los miembros del tripartito".

Por el contrario, acusa al tripartito, "el Palacio de Congresos está ahí, al servicio de la ciudad, y al servicio de Asturias, y si no se le está sacando el provecho que se debería, es por la incapacidad de los encargados de gestionarlo, que dedican más su tiempo a enredar y buscar fantasmas, que a llenar esta equipación de contenido, o sea, a generar actividad y riqueza para esta ciudad".

La otra parte del análisis de Caunedo tras los duros ataques del tripartito, que el jueves echaron cuentas y acusaron al PP de haber dejado al menos "70 millones de pufos" en la ciudad, estuvo dedicada a sacar pecho por lo realizado en la ciudad durante los mandatos populares. "Este Oviedo no salió de la nada", declaró. "Este Oviedo lo hicimos los ovetenses y el Partido Popular, y es algo que queremos y podemos decir muy alto". Según Caunedo el PP no tuvo la suerte de "encontrarse las cosas hechas". "Cuando llegamos al Ayuntamiento, Oviedo estaba como estaba, como todos los ovetenses recordarán, y pocos apostaban por sus posibilidades. Muchos menos se podían imaginar, que Oviedo llegaría a ser lo que es, y como es hoy". El líder de la oposición concluye que "la historia juzgará las aportaciones de cada uno" y que pocos reveses tendrá el tripartito porque se dedican a "cruzarse de brazos, vivir de rentas y criticar lo que hicieron otros sin aportar nada".