El lobo, a las puertas de Oviedo: ganaderos de Caces y Siones, en pie de guerra tras sufrir varios ataques

"Estamos desamparados y en la más completa inseguridad pero no nos dan ninguna solución", denuncian los vecinos de la zona

Los restos de «Luna», la burra de cinco meses que fue devorada por los cánidos en Caces. | Daniel Suárez

Los restos de «Luna», la burra de cinco meses que fue devorada por los cánidos en Caces. | Daniel Suárez / Oriol López

Oriol López

Dos ovejas, una cabra y una burra de cinco meses, muertas y devoradas por completo. Otras tres ovejas, heridas, salvaron la vida. Es el saldo que dejaron el pasado septiembre en las localidades de Caces y Siones los ataques del lobo, que llevan sufriendo desde principios de ese mes, según relatan los vecinos.

El primer caso se registró el 4 de septiembre. Un ganadero de la zona localizó a dos de sus ovejas muertas y "prácticamente comidas por completo". La noche siguiente los cánidos regresaron a terminar con el festín. "Sabemos que volvieron porque se puso una cámara y se grabó a dos lobos", explica Daniel Suárez, vecino y ganadero de Caces. No era su explotación pero él también resultó ser uno de los damnificados cuando, el 28 de septiembre, los depredadores volvieron a la carga. Entraron en su finca, situada encima del cementerio de Caces, y acabaron con la vida de la burra "Luna", un ejemplar de variedad zamorana de tan sólo cinco meses.

"Me encontré a la burrina como se ve en la foto, prácticamente comida la mitad. Llamé al guarda forestal y subimos a verlo. En principio él apostaba por que fuera un perro salvaje", detalla Suárez, pero el examen de los restos no dejó lugar a dudas: los autores fueron los lobos. No quedó ahí la historia porque el sábado 30 hallaron a tres ovejas heridas y una cabra muerta en la vecina Siones. "Estamos desamparados y en la más completa inseguridad pero no nos da ninguna solución", denuncia el ganadero, al que le ofrecen desde el Principado 132 euros de indemnización por su pérdida, lo que le parece "irrisorio".

Además de las grabaciones, existe el testimonio de un conductor que vio un ejemplar. A su vez, se produjo otro ataque en Perlín con un balance de daños de media docena de ovejas. Barajan la posibilidad de que todos los incidentes tengan origen en la misma manada, "que quizá sea una pareja y su camada".No es la única fauna que afirman que campea por la zona: "En Las Carangas hay una osa con una cría, la vieron montones de vecinos. Una chica las ve a diario desde casa. Avisó a la consejería y le dijeron que qué querían que hicieran".

Suscríbete para seguir leyendo