El primer Vesu de la Rodriga: el festival "indie" estrena anfiteatro natural

"Holograma" y Elena del Frade estrenan escenario en una mañana que destiló buena onda en el centro de Oviedo

En la imagen superior, público durante el concierto. Debajo, Ignasi Boldú, cantante y compositor de «Holograma». Sobre estas líneas, a la izquierda, Elena del Frade y su singular cuerpo de coro y baile. | J. Rus

En la imagen superior, público durante el concierto. Debajo, Ignasi Boldú, cantante y compositor de «Holograma». Sobre estas líneas, a la izquierda, Elena del Frade y su singular cuerpo de coro y baile. | J. Rus

Gonzalo García-Conde

Gonzalo García-Conde

No todos los carbayones saben que, al pie del Seminario, en lo que se conocía como colina de San Cipriano, ocultos tras un muro viviendas, se encuentran los Jardines de la Rodriga. Una zona verde con mucho de romanticismo gótico que fue en sus distintas vidas solaz del Marqués de la Rodriga, escondite durante la guerra, camposanto y silencioso testigo de duelos de honor a muerte. Hoy, más misterioso aún, si cabe, es refugio de soledades voluntarias, lecturas, tardes secretas, amores breves y primeros cigarrillos adolescentes.

Este escenario singular ha sido el espacio municipal que ha escogido la Asociación Music Monster para reinventar, con el apoyo de la Fundación Municipal de Cultura, la cara ovetense del festival veraniego Vetusta Suena, el Vesu. Una programación musical que alcanza su quinta edición dedicándose al ‘indie’, una etiqueta que, con treinta años de recorrido en la historia de la música, ya es más un contenedor de tendencias que un verdadero estilo.

El primer Vesu de la Rodriga

El primer Vesu de la Rodriga / Gonzalo García-Conde

La idea de instalar en la Rodriga el "escenario FMC" para las sesiones vermú puede ser la ocurrencia más luminosa de 2024. Nos ha permitido descubrir entre tilos, castaños y desniveles que hacen de anfiteatro natural, el que puede ser uno de los espacios culturales estrella de nuestra ciudad.

A la una de la tarde del sábado, cuando Elena del Frade se subió al escenario, un arroyuelo de espectadores se acercaba por los caminos serpenteantes de los jardines con esa sonrisa de cuando sabes que estás haciendo un plan sorprendente y gozoso a partes iguales.

El primer Vesu de la Rodriga

El primer Vesu de la Rodriga / Gonzalo García-Conde

Musicalmente, la propuesta de la compositora asturiana resultó perfecta para la ocasión. Una colección de canciones muy frescas que interpreta creando capas de sonido con sampler y guitarra. Melodías llenas de dulzura y fragilidad combinadas con versos ácidos y letras afiladas. Frade convierte sus inseguridades y la timidez que asoma a su voz en un estilo exclusivo. Las torpezas sentimentales son su gran victoria. En su sonido, marcadamente femenino, se hizo acompañar de un trío de voces, sus particulares Fradettes, que entre coros y danzas art decó, llenaron de sentido del humor y de ritmo la propuesta.

"Hologramma", la banda catalana que firmaba la segunda parte de esta matiné electropop, también triunfó con sus efectos y capas de sonido, pero en este caso revestidos con una formación de banda de rock. Equilibraron la mañana con la intensidad creciente de guitarras y melodías, con la voz de "enfant terrible" de su cantante y con sus letras de chicos sensibles que se quitan la máscara de superhéroes en la intimidad.

Vesu ofreció este planazo de mañana de fin de semana campestre, con vermú de La Paloma y pizzas artesanas, musiquita, acceso gratuito, espacio encantador, familias, parejas, amigos y buena onda para abrazar el primer día del verano. Hoy, domingo, repiten plan con "Las Dianas" y Rocío Saiz. Empieza a la una. No perdérselo.

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