El Ayuntamiento de Oviedo cierra la operación Calatrava y firma mañana la compra de las plantas comerciales

El gobierno local asegura que ya le consta el interés de varias empresas para instalarse en esos 45.000 metros cuadrados útiles

Imagen de archivo del acceso al centro comercial.

Imagen de archivo del acceso al centro comercial. / Luisma Murias

Chus Neira

Chus Neira

Sin novedades sobre el guión previsto, la junta de gobierno del Ayuntamiento de Oviedo tiene previsto aprobar hoy la adquisición de las tres plantas comerciales del edificio diseñado por Calatrava en Buenavista por 4,85 millones de los que solo se abonarán 1,24 millones, al retenerse el resto en concepto de deudas tributarias que pesaban sobre los locales.

Con esta operación, el equipo de Canteli da carpetazo definitivo a una operación que ha tenido distintas versiones desde 2022 y que pretende poner fin a los seis años en los que más de la mitad del Calatrava, su corazón comercial, ha permanecido cerrado.

Los pagos se realizarán mañana a las dos sociedades que el fondo suizo Varia articuló para quedarse con el centro comercial en el último concurso de acreedores, Murivel y Ransant. Además de haber incorporado dinero del remanente para hacer frente a la operación, a la hora de resolver la compra de las tres plantas comerciales también se presentan los correspondientes informes municipales, que incluyen los de Tesorería, Dirección de Congresos, Edificios y Patrimonio, Medio Ambiente, Servicios Básicos, Asesoría Jurídica, Oficina Presupuestaria e Intervención. La documentación, y en eso sí se produce una ligera variación, incluye una nueva tasación realizada por Medio Ambiente y Planeamiento hace dos semanas, y que rebaja los 19 millones citados hasta ahora a 17,47 millones. La diferencia, explican fuentes municipales, reflejan la ligera pérdida de valor que se desprende del informe de Edificios por los desperfectos que presentan estas plantas comerciales. No obstante, indican en Planeamiento, estos desperfectos, vinculados especialmente a las humedades, no impiden que la conservación en general del inmueble pueda ser calificada aceptable.

Nacho Cuesta no descarta que se puedan instalar también equipamientos municipales

A la hora de retener las cantidades por deudas tributarias, en especial del IBI, y dejar el pago en 1,24 millones, el concejal de Planeamiento, Nacho Cuesta, incide en que se han tratado las distintas deudas de forma independiente, de forma que unas, de 2019 a 2023, era las de la sociedad concursada, y por tanto de cobra muy difícil de no ser por esta operación, sostiene, y otras las que corresponden ya a las sociedades de Varia, una vez que los locales pasaron a ser de su propiedad.

El Ayuntamiento tendrá que iniciar ahora la segunda parte de la operación Calatrava, y para ese viaje aseguran que tienen claro el destino, pero todavía algunas dudas sobre el recorrido. Las plantas comerciales del Calatrava, expone Cuesta, «tienen una clara vocación de dinamización, de activación empresarial, que es compatible con ligar su actividad a la actividad del Palacio de Exposiciones y Congresos». Es decir, se utilizarán para alojar empresas, para desarrollar un semillero de proyectos empresariales, pero también se valora la posibilidad de instalar equipamientos municipales.

Las dudas del recorrido tienen que ver con la forma en que transformar el edificio para que pueda acoger estos usos. Ahora mismo el equipo de gobierno se debate entre abordarlo por fases e ir recuperando estas plantas comerciales poco a poco, integrándolas en la actividad del PEC y abriendo nuevos espacios paulatinamente, o si, por el contrario, hacerlo de forma integral, abordando una gran reforma de las tres plantas que permita utilizar todo el edificio, tras las obras, en su integridad.

Lo que sí ha confirmado el Ayuntamiento es que la idea de instalar empresas en estas plantas comerciales ya parece tener una base sólida. Así lo indica el hecho de que al anuncio de la operación para comprar los locales han seguido contactos de diversas compañías, que se han dirigido al Ayuntamiento interesadas en instalarse en el barrio de Buenavista, en esos 45.000 metros cuadrados útiles con los que cuentan las plantas.

El concejal Nacho Cuesta ha insistido en que «el mayor compromiso» que tiene el Ayuntamiento ahora es «con los vecinos del barrio de Buenavista y del Cristo», para «recuperar estos espacios y acoger nuevas actividades con la mayor diligencia posible para la regeneración de la zona».