Cómo perder el miedo a la tecnología en los talleres del cibercentro de la Lila

Amelia Pidal, vecina de Oviedo, quiere perder el temor a su móvil. Le aterraba la idea de entrar en internet, lleno de "timos y engaños" y, a veces, le superaba el simple hecho de acceder a un portal en la web. Incluso las cosas más básicas, como hacer una captura de pantalla, podían suponer un reto para esta abuela de dos nietos. Por eso, decidió acudir el pasado martes al cibercentro municipal de la Lila, para que sus profesionales le orientasen mejor. Con una sonora carcajada, Amelia Pidal añadía mientras levantaba su móvil: "Ya no hace falta que mi nieto me lo enseñe todo".

Desde el cibercentro de la Lila lo tienen muy claro. "A veces tienes que hablar de temas más delicados e intentar que no se asusten", apunta Ángeles Losada, una de las personas encargadas de la iniciativa. Con este objetivo en mente, el centro ofrece una serie de actividades que estarán presentes todo el mes de julio. En el salón de actos, de lunes a viernes, tendrán lugar varias charlas sobre temas relacionados con internet y tecnología, como la gestión de contraseñas, aprender a manejar Bizum o incluso crear imágenes con inteligencia artificial. Como cuenta Ángeles Losada, "en la calle también hay riesgos, y no por eso dejas de salir", algo que quieren aplicar a la hora de usar internet. Además, las charlas ofrecen material de apoyo en una pantalla para que se siga la explicación de forma más visual, amena y divertida.

Otra de las iniciativas del centro es la de atender las dudas sobre dispositivos móviles. Cada martes y jueves, al cobijo de la sombra de los árboles del jardín, cualquiera puede acudir a plantear sus inquietudes sobre el teléfono. Su responsable, Óscar Robles, está totalmente dispuesto a solucionar las dudas de los asistentes, con la idea de que, como él dice, "Se pierda el miedo a la informática, sobre todo la gente mayor". El monitor recibe decenas de preguntas sobre el reinicio del móvil, las pestañas de Chrome o el almacenamiento en la nube, a las que responde encantado. La iniciativa, como cuenta Marisol Muñoz, una de las asistentes, es "muy dinámica, y sirve para conocer el funcionamiento básico de los móviles". El taller al aire libre es "bueno para enseñarnos cosas que poner en práctica", como explica Marisol, y también puntualiza la importancia de "escuchar al resto para aprender cosas nuevas".

Tanto las charlas como el taller al aire libre duran de once de la mañana a una de la tarde. La entrada es libre y no hace falta reserva alguna. Solo se requieren ganas de aprender y de quitarse el miedo a la hora de utilizar el teléfono móvil.

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