El adiós a una "torre" de las Cámaras: los compañeros despiden a Carlos Rodríguez de la Torre, ejemplo "de los mejores valores" de la institución

El presidente de la Junta, el alcalde de Oviedo y la vicepresidenta del Principado asistieron al acto

Pablo Castaño

Pablo Castaño

Carlos Rodríguez de la Torre era "ejemplo de los mejores valores camerales", un faro para sus compañeros. Lo dijo, emocionado, el empresario José Manuel Ferreira, vicepresidente de la Cámara de Oviedo y el encargado de pronunciar, en nombre de la institución, las palabras de homenaje a quien era, hasta que su corazón se paró de forma repentina el pasado 3 de junio, el coordinador general de la Cámara de Oviedo. "Se derrumbó la torre", lamentó, con palabras entrecortadas, Ferreira.

El jueves de la semana pasada se celebró en Salinas el funeral en recuerdo de Carlos Rodríguez de la Torre –abogado que también fue secretario de la Cámara de Comercio de Avilés y portavoz municipal del PP en ese concejo–, pero la Cámara de Comercio de Oviedo quiso acentuar la despedida con un segundo acto religioso en la basílica San Juan el Real de Oviedo. En primera fila la familia, con su esposa,_María Luisa Fernández Ruiz, y los dos presidentes de la Cámara de Comercio de Oviedo que confiaron en Rodríguez de la Torre: Carlos Paniceres y su antecesor, Fernando Fernández-Kelly. Junto a ellos, el alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli; el presidente de la Junta General del Principado de Asturias, Juan Cofiño; la vicepresidenta del Principado de Asturias, Gimena Llamedo; el presidente de la Cámara de Comercio de Gijón, Félix Baragaño; el presidente de la Cámara de Comercio de Avilés, Daniel González, y el coronel delegado de Defensa de Asturias, Juan Luis González.

En el templo también estaba la consejera de Transición Ecológica, Nieves Roqueñí, y una nutrida representación del mundo de la empresa en la que estaban, entre otros, el director general de FADE, Alberto González; el vicepresidente de esta misma organización y presidente de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Asturias (AJE), Pablo García; el presidente de OTEA, José Luis Álvarez Almeida; el presidente de Windar, Orlando Alonso; el director general del grupo El Gaitero, Ricardo Cabeza...

También destacaba la nutrida representación de cargos del PP, encabezada por el presidente del partido en Asturias, Álvaro Queipo, los diputados Luis Venta y José Agustín Cuervas Mons, y el ex dirigente Isidro Fernández Rozada.

Durante la misa, el párroco Francisco Javier Suárez lamentó la temprana muerte, a los 61 años, de un hombre "con tantos proyectos e ilusiones". "Todos admirábamos su discreción, su lealtad, su naturalidad, su bonhomía, su compromiso, su simpatía y su empatía", señaló por su parte José Manuel Ferreira al final del acto religioso antes destacar "los sólidos sillares" con los que estaba construido De la Torre, "que murió en acto de servicio, con las botas puestas", en referencia a su repentina muerte cuando se desplazaba en tren a su puesto de trabajo. "Cuando un hombre muere, no es que un capítulo sea arrancado del libro, sino que es traducido a una lengua mejor", señaló emocionado Ferreira citando al poeta metafísico inglés John Donnem. Tras sus palabras, aplausos.