El Banco de España revisa su álbum histórico que incluye fotografías de la construcción de la primera sede ovetense, retratos de trabajadores y de asturianos con cargo

El Banco de España conserva una excepcional colección fotográfica en su Archivo, a la que durante décadas nadie prestó atención pese a que refleja la intrahistoria de la entidad desde el último cuarto del siglo XIX hasta la actualidad.

Una parte de ese archivo puede conocerse ahora gracias a 550 fotografías, la mayoría nunca expuestas, con las que se ha dotado la exposición montada en la sede madrileña de la principal entidad financiera nacional. Con la exposición, comisariada por Juan Miguel Sánchez Vigil, Elena Serrano y Patricia Alonso, y que permanecerá abierta hasta el 20 de julio, culmina un largo proyecto para catalogar y dar a conocer a toda la sociedad el Fondo Fotográfico del Banco de España, formado por más de 25.000 fotografías datadas entre 1874 y 2023. Imágenes tomadas con una finalidad documental que ahora se reúnen con el doble propósito de "poner en valor su función como garante de la memoria y difundir los fondos, cumpliendo así el compromiso de compartir y poner a disposición de la ciudadanía el rico patrimonio histórico que custodia", sostienen los promotores.

La muestra sigue una línea cronológica fragmentada en cinco secciones: El tiempo amarillo (fotografías del siglo XIX), La fotografía como documento (1900-1925), De la edad de plata a la transición (1925-1975), Spain is different (1975-2023) y Hacia la inteligencia artificial (siglo XXI). Cinco secciones que presentan retratos, espacios y actividades de la institución. De tal manera que hay lugar para el urbanismo, para la arquitectura, para las obras públicas, las gentes y las costumbres. Y en todo eso hay espacio para Asturias. Como por ejemplo, para ver en obras la que fue la primera sucursal del Banco de España en la capital asturiana, en la calle Suárez de la Riva 11, hoy sede de la Presidencia del Principado.

Las fotografías más antiguas que se conservan de las sucursales del Banco de España en su Archivo datan de 1880 y son de las primeras sedes territoriales que se abrieron en Valencia y Alicante en 1858. El resto de sucursales –hasta un total de setenta– se establecieron a partir del Decreto de 19 de marzo de 1874 que concedió al Banco de España el monopolio de emisión de billetes, "tras el cual fue intensa la labor de búsqueda de sedes a lo largo de la geografía española, como instrumentos imprescindibles en la labor de expansión del billete", relata la muestra.

Durante 1874 se abrieron sucursales en Barcelona, Bilbao, Cádiz, La Coruña, Málaga, Oviedo, Palma, Pamplona, San Sebastián, Valladolid, Vitoria y Zaragoza... Pero se tardarían años en construir sede física en Asturias. En la Memoria de actividades del Banco de España de 1906 se recoge que "terminada la construcción de los nuevos edificios destinados a las Sucursales de Cáceres y Ciudad Real, (...) se ha adquirido una casa para la de Badajoz y un solar para construir la de Oviedo". Una construcción que se comenzaría al inicio de la década de los 20 y que abriría sus puertas en 1923, tal como se muestra en las fotografías del archivo.

Entre la documentación también consta que fueron más de 600 los profesionales de toda la geografía española que hicieron fotografías para el Banco de España y al menos hay uno identificado con la región: Celestino Collada Vega (Oviedo). Más entrañables que los espacios resultan los retratos de trabajadores del Banco de España, entre los que se cuentan la fotografía muy sonriente de María Jesús Jove Arechandieta. De la que se dice que era Auxiliar temporera amovible de la Sucursal de Oviedo en 1943. Y llamativas son, también, las imágenes de Juan Carlos de Borbón recorriendo la Cámara de Oro del Banco. En el apartado de personalidades queda referencia también del gijonés José Ramón Álvarez-Rendueles, nombrado en 1978 por el Gobierno de Adolfo Suárez Gobernador del Banco de España –con Mariano Rubio como subgobernador.

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