La Guardia Civil localiza a un conductor huido hace un mes en Oviedo al presentarse al examen del carné

El varón, de 29 años, culminó con éxito el pasado 22 de junio una fuga temeraria cuando un patrulla le dio el alto por ir sin cinturón, iniciada porque tenía los puntos agotados

Un coche de la Guardia Civil.

Un coche de la Guardia Civil.

Le perdieron totalmente la pista, pero terminó cayendo en la trampa. Un conductor de 29 años y vecino de Oviedo que consiguió burlar a la Guardia Civil el pasado 22 de junio conduciendo de manera temeraria después de que le dieran el alto por ir sin cinturón, fue finalmente localizado el 9 de julio, más de dos semanas después, cuando acudió a la Jefatura Provincial de Tráfico para hacer el examen teórico para recuperar el carné de conducir. Según pudo averiguar la Benemérita, el hecho de que tuviera los puntos agotados fue lo que llevó al hombre a iniciar una huida en la que obligó a dar frenazos a otros coches, incumplió los límites de velocidad, circuló en dirección contraria y se saltó semáforos y pasos de peatones. 

Los hechos investigados por la Guardia Civil como «una conducción con temeridad manifiesta» se remontan a hace casi un mes. Una patrulla del Destacamento de Tráfico que circulaba por la Autopista en sentido a León por la Ronda Exterior de Oviedo se percató de que un conductor iba sin el cinturón puesto. Los agentes comprobaron telemáticamente la titularidad del vehículo, concluyendo de que su identidad coincidía con el conductor, descubriendo además que le constaba la pérdida total de los puntos del carné. 

Fue entonces cuando los guardias civiles encendieron las sirenas y se dispusieron a interceptar el vehículo. El conductor, al verse sorprendido, hizo caso omiso y emprendió una temeraria huida. Para empezar dio un volantazo, invadió la zona cebreada de la calzada y se incorporó de golpe a la carretera O-11, la salida desde la Autopista a la glorieta de Fozaneldi, obligando a varios conductores a frenar bruscamente para evitar una colisión. Los guardias informaron inmediatamente de lo sucedido a la Policía Local y Nacional para pedir apoyo en su persecución.

Una vez en el casco urbano, el conductor elevó la velocidad incluso en las calles con límites de velocidad de 30 kilómetros por hora y realizó maniobras como no respetar la prioridad de paso de peatones, los semáforos e incluso circular en sentido contrario en las glorietas, originando con ello un gran peligro para otros conductores.

A pesar del amplio operativo, los agentes de la autoridad terminaron por perderle la pista. En los días sucesivos siguieron buscándole, pero no fue hasta el 9 de julio, cuando gracias a los datos recabados por el Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico (GIAT) la Guardia Civil consiguió localizarle cuando acudió al examen teórico para la recuperación del carné en la Jefatura de Tráfico. 

Según indicaron ayer fuentes de la Comandancia de Asturias, la investigación llevaba a cabo por los efectivos del Sector de Tráfico de Asturias evidenció que la supuesta conducción temeraria que puso en peligro la seguridad vial estaba motivada por la actitud del conductor de sustraerse del control de la patrulla del Destacamento de Oviedo. Consideran que el investigado era totalmente consciente de que su permiso de conducción carecía de validez, debido a la pérdida de todos los puntos, y por esa razón decidió emprender su huida.

Este caso se conoce apenas una semana después de que la Guardia Civil diese a conocer que el pasado cinco de julio había sorprendido in fraganti a un varón de 20 años, de nacionalidad marroquí y vecino de Bilbao, utilizando un dispositivo no autorizado durante el examen teórico para la obtención del permiso de conducir. Su actitud y lenguaje corporal levantó las sospechas de los efectivos del GIAT, presentes en las pruebas mencionadas, por lo que, con el fin de no interferir en el proceso de exámenes del resto de los aspirantes, optaron por intervenir una vez finalizada la prueba.