Novedad en el posible once del Oviedo para la final por el ascenso: Borja Sánchez se apunta

El atacante ovetense se entrenó ayer al mismo ritmo que sus compañeros y podría sustituir en Cornellá a Paulino, que está prácticamente descartado

Carrión, Luengo, Borja y Álex Millán, ayer, en El Requexón.

Carrión, Luengo, Borja y Álex Millán, ayer, en El Requexón. / Irma Collín

Joaquín A. Cuesta

Joaquín A. Cuesta

Borja Sánchez se apunta a la final por el ascenso de este domingo en Cornellá ante el Espanyol (18.30 horas). El atacante ovetense, fijo para el entrenador Luis Carrión en los últimos partidos siempre que ha estado bien físicamente, completó ayer prácticamente todo el entrenamiento, el primero de la semana sin contar el regenerativo del lunes, tras la victoria en el Tartiere (1-0) en la ida ante los catalanes.

Borja no pudo disputar ni un solo minuto en el estadio por una sobrecarga en el cuádriceps que arrastra desde hace varias semanas, pero si no hay sorpresa sí podría estar apto de cara a este domingo. El "25" se retiró ayer cuando quedaban quince minutos por precaución, pero las sensaciones son buenas.

La pancarta de apoyo al Oviedo, ayer, en El Requexón. | Irma Collín

La pancarta de apoyo al Oviedo, ayer, en El Requexón. / Irma Collín

La participación del atacante se antoja importante para Carrión, puesto que Paulino, extremo derecho, está prácticamente descartado para el partido, tras haber caído lesionado el domingo. Ayer tampoco se entrenó Cazorla y su presencia se antoja muy complicada. El cántabro llevaba tiempo forzando para poder ayudar al equipo pese a tener molestias musculares y su previsible ausencia obligará al técnico a hacer modificaciones. Es ahí donde entra Borja. Si el ovetense esta apto, lo previsible es que juegue por la izquierda, pasando a Moyano a la derecha, como sucedió ante el Eibar. Otra opción sería alinear a Dubasin o a Masca, aunque Borja, en el caso de estar listo, parte con ventaja en el dibujo de Carrión. La plantilla se entrenó ayer en un ambiente de mucho optimismo y pudo ver una pancarta que dejaron los aficionados. "El Real Oviedo fue, es y será lo más grande del fútbol", rezaba el lema, recordando una frase de Diego Cervera.

Calvo, emocionado. Dani Calvo, central azul y uno de los pilares del equipo, analizó ayer la situación azul y dijo que la ida ante el Espanyol "fue el mejor partido de mi vida, sin duda. El entorno, el ambiente… Me lo guardaré toda la vida", destacó el defensor.

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