El Oviedo modifica el proyecto de la Lángara y salva una fila de butacas: esta es la decisión tomada

Nuevo capítulo en el culebrón de la tribuna Lángara. El Oviedo ha decidido modificar el proyecto para la construcción de 23 nuevos palcos VIP en la tribuna Lángara, lo que implicaba reubicar a los 542 aficionados que tenían su localidad en esa zona del Tartiere. La entidad azul anunció ayer que ha llevado a cabo una reestructuración total del proyecto para dicha zona y optimizado el diseño, renunciando a determinadas mejoras "para tratar de que las molestias ocasionadas sean las menores posibles" y rebajar así el número de afectados. Por ello, la totalidad de abonados situados en la fila 10 de la tribuna Lángara mantendrán su localidad y sus butacas no serán finalmente "engullidas" por los nuevos palcos VIP.

Además, y atendiendo a una de las demandas que los aficionados azules llevan realizando desde hace varios años, la entidad carbayona habilitará para 30 abonados con movilidad reducida ubicados en la Lángara localidades más cómodas y a las que podrán acudir con un acompañante, tal y como venían solicitando.

Al mismo tiempo, el club atenderá personalmente a cada uno de los afectados por la construcción de los palcos VIP para abordar su caso, tratando así de alcanzar una solución que intente satisfacer en la medida de lo posible las peticiones de este grupo de socios. El horario de atención a los abonados situados en las filas 11 y 12 será de 10 a 20 horas, aunque lo harán por tramos.

Desde el día 4 de julio en adelante, todos los usuarios con sillas de ruedas y los abonados con número de carné del 1 al 2.000 podrán ser atendidos por el personal del club. Del socio número 2.000 al 4.000, tendrán que esperar hasta el día 8. Del 4.000 al 5.000, hasta el día 9, del 5.000 al 8.000 al 10 y del 8.000 en adelante, a partir del día 11 de julio.

Además de estas nuevas medidas, el Oviedo lanzó otra serie de decisiones para mitigar los perjuicios ocasionados a los aficionados damnificados por las reubicaciones, como el descuento del 50 por ciento de su abono, cinco años de reserva, bloqueo para ellos de los asientos que se liberen en la tribuna Lángara y dos períodos prioritarios para reubicaciones exclusivas para dichos abonados, con una reorganización del calendario.

Todas estas medidas llegan tras una reunión celebrada entre una representación de los afectados y el propio Oviedo. El club dice "entender" las quejas de los hinchas afectados por las reubicaciones, pero asegura que las obras son necesarias para la modernización del estadio.

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