El Molleo de Siero y el Molledo cántabro afianzan lazos: "Es mucho lo que nos une"

Dieciocho años han pasado ya desde que Agustina Castro, presidenta de la asociación Los Hórreos de Molleo, de Siero, impulsara, junto al alcalde de otro Molledo, en Cantabria, por aquel entonces, Dámaso Tezanos, el hermanamiento de ambas localidades homónimas. Por supuesto, también contó en aquel momento con el que era regidor sierense, el fallecido Juan José Corrales. Desde aquella primera cita, cada año, cuando es posible, "nos reunimos para seguir afianzando los lazos que nos unen, tanto a nivel cultural como de amistad, puesto que a fuerza del pasar del tiempo se han creado muy bonitos vínculos", señaló ayer Castro con motivo de un nuevo encuentro. Fue con una comida de hermanamiento que tuvo lugar en un restaurante de Noreña, con la asistencia de alrededor de setenta personas.

"De aquí, de Siero, somos 50, y de Cantabria vienen una veintena de vecinos aproximadamente", explicó el colectivo anfitrión. A la reunión acudió el alcalde de Siero, Ángel García, la alcaldesa de Molledo, Verónica Mantecón, y la concejala de Mayores sierense, Pilar Santianes.

Desde Asturias se empujó tras el confinamiento para retomar los encuentros, que se habían suspendido durante la pandemia. El de este sábado se enmarca dentro de la fiesta anual del Día del Socio del colectivo sierense.

Mantecón, que regenta la alcaldía de una localidad de 1.500 habitantes, señaló que "este año hemos venido menos personas, porque nos coincidía con las fiestas de San Pedro, además de algunas patronales de las zonas vecinas y un torneo de patinaje". Aun así, destacó que "venir a Asturias siempre es un placer, porque nos hacen sentir como en casa". Tanto es así, que la regidora aseguró que "son muchos los que se han quedado con la pena de no poder venir, porque nos hemos cogido mucho cariño los unos a los otros".

Antes de comenzar la comida de hermanamiento, el alcalde de Siero hizo entrega a la alcaldesa cántabra de una placa conmemorativa como recuerdo de este nuevo encuentro. Mientras, la junta directiva de la asociación anfitriona le regaló un gran ramo de flores.

Los de Cantabria desembarcaron en Noreña sobre las 13.15 horas para disfrutar de una comida tipo espicha en la que no faltaron la tortilla de patata, las croquetas, la empanada, los tortinos con picadillo y, cómo no, la sidra y el arroz con leche.

Agustina Castro, que se mostró tan nerviosa como ilusionada por este encuentro, recordó que "hace dos años les llevamos más de 150 botellas de sidra y volvimos solo con las cajas". En aquella ocasión, fueron 65 vecinos los que se desplazaron hasta la localidad cántabra, donde "disfrutamos de una jornada espectacular, con bailes y música tradicionales tanto de aquí como de allí".

El alcalde de Siero quiso felicitar a los dos pueblos, sobre todo, porque "hoy en día, que estamos tan ocupados discutiendo entre territorios, este tipo de encuentros no hacen más que demostrar que se pueden limitar y reducir las diferencias y que, al final, todos somos uno mismo". Además, "de esta manera, se pueden comprobar y comparar las situaciones de diferentes lugares, para coger perspectivas diferentes sobre cómo abordar el día a día".