Festejos aboga por prohibir de nuevo el botellón en El Carmín de la Pola: "El año pasado dio muy buenos resultados"

Los organizadores quieren volver a eliminar las bebidas de alta graduación durante la jira

Por la izquierda, Lucía Noval; el alcalde, Ángel García; el secretario municipal, Felipe Fanjul, y la edil Ana Nosti, ayer, durante la firma del convenio.

Por la izquierda, Lucía Noval; el alcalde, Ángel García; el secretario municipal, Felipe Fanjul, y la edil Ana Nosti, ayer, durante la firma del convenio. / A. S.

Con las fiestas de El Carmín en puertas, la Sociedad de Festejos de Pola de Siero ultima ya los detalles de la gran celebración del verano en la capital sierense. Y entre las cuestiones que se están terminando de atar figura de nuevo una medida que el año pasado "dio muy buenos resultados": la prohibición de meter bebidas de alta graduación alcohólica en los praos de La Sobatiella, donde se celebra la gran jira del lunes.

El objetivo es de nuevo atajar los "macrobotellones" que se producían en la fiesta, con escenas que en años pasados llegaron a sonrojar a la organización. Festejos tiene claro que quieren recuperar la esencia de una fiesta que tradicionalmente ha sido familiar, y para ello consideran "muy positivo" el hecho de poder eliminar otras formas de divertimento que, como ya defendían el año pasado, "no tienen cabida" en las fiestas de la Pola.

Para ello, el año pasado se puso en marcha un sistema de control de seguridad privada contratada por Festejos, con el fin de controlar las bebidas que llevaban los romeros al prao de la fiesta, requisando las bebidas con más grados de alcohol y permitiendo, como siempre, el vino, la cerveza y la sidra tradicionales en la romería. El plan del año pasado funcionó "muy bien" a juicio de los organizadores, con pocas incidencias y con una fiesta en general tranquila, en favor de la recuperación de la esencia de la gran merienda que es tradición. Y la intención de este año es que así siga siendo, como señalaba ayer la presidenta de la Sociedad de Festejos, Lucía Noval. "Dependemos de la seguridad de dentro y de fuera, pero esperamos que se repita el plan porque el año pasado fue muy positivo", reflexiona.

Del mismo modo aspiran a repetir experiencia de reciclaje en la jira, que el año pasado también tuvo unos resultados muy satisfactorios. Con ello se lucha contra otro de los efectos de la jira, el de la acumulación de basura que durante años convirtió La Sobatiella en un mar de desechos. En la última edición de la fiesta se repartieron numerosos contenedores para reciclaje y recuperación de vidrio que tuvieron buena acogida entre el público, con acciones para concienciar sobre la necesidad de recoger los restos que se generan en la fiesta.

La Sociedad de Festejos está a punto de dar a conocer además quién será el pregonero de las fiestas, así como el programa musical y de actividades entre los días 18 y 23 de julio. Una tarea, la de la contratación de orquestas y actuaciones, que no está siendo del todo sencilla por la coincidencia de fechas con otro de los grandes eventos del verano en el centro de Asturias: el Boombastic de Llanera, que se celebra los días 18, 19 y 20 de este mes.

Lo que sí habrá, como ya han anunciado en sus redes sociales, será el "FestiPrau", la extensión festiva de El Carmín al parque de Alfonso X el Sabio que contará con espacio market, música y gastronomía con varios "food trucks", animación infantil y una concentración de vehículos clásicos. La cita lleva en marcha varias ediciones y ha sido un éxito de afluencia de público en el centro de la capital sierense.

También hay cartel anunciador de las fiestas, obra del artista gaditano Antonio Gaga, una creación a todo color que se impuso entre decenas de aspirantes, fruto del interés que despierta el concurso entre los creadores para poner imagen a la llamada "romería de Asturias".

El Ayuntamiento aporta 30.600 euros a las fiestas, una cifra "insuficiente", según la entidad

El Ayuntamiento de Siero formalizó ayer con los representantes de la Sociedad de Festejos de Pola de Siero el convenio que regula la subvención nominativa para financiar las fiestas de este año, con una dotación de 30.600 euros. Esta cantidad irá destinada a la organización de las tres grandes fiestas de la capital polesa: Comadres, Güevos Pintos y El Carmín. Se trata de la misma cantidad aportada por el Consistorio en los últimos años, y desde Festejos siempre han lamentado que la aportación económica sea "insuficiente", puesto que se trata de tres fiestas de calado que exigen un gran esfuerzo para los organizadores y a cambio generan un retorno enorme para la localidad, especialmente en el caso del Carmín. De hecho, Festejos cifra la subvención municipal en apenas un 25 por ciento de lo que cuestan las fiestas, y señalan que se trata de uno de los convenios más bajos de Asturias en comparación con el tamaño de las celebraciones. Solo la seguridad que cada año contratan para la merienda en los praos de La Sobatiella supone un gasto de cerca de 16.000 euros. A principios de año los representantes de la entidad llegaron a advertir de que no tenían clara su continuidad al frente de las fiestas.