El Archivo Histórico de Asturias sorprende a los visitantes: "Es impactante, no tenía ni idea de cómo era esto"

La ovetense María Elena Fernández preparó, durante un tiempo, las oposiciones al cuerpo de funcionarios de Instituciones Penitenciarias. La vida la acabó llevando por otros caminos, pero de aquella etapa le quedó la inquietud por ver cómo es un presidio por dentro. La sació, en gran medida, ayer, cuando acudió a la primera de las dos jornadas de puertas abiertas que organiza el Archivo Histórico de Asturias, coincidiendo con el Día Internacional de los Archivos. Una convocatoria que se saldó, solo ayer, con más de 170 visitas a las instalaciones.

La historia del inmueble, que durante más de ocho décadas sirvió como presidio, fue el hilo conductor de las visitas guiadas, introducidas por la directora del Archivo, María Concepción Paredes. "En este edificio tenemos casi 15.000 metros útiles, con 65 kilómetros de estanterías. Estamos entre los 5 o 6 mayores archivos de España", explicó, antes de detallar que, de toda esa documentación, 33 kilómetros de estanterías son de documentos de consulta pública, y entre seis y ocho están en fase de organización. "Actualmente tenemos a seis archiveros trabajando en esto, y contaremos con dos más a partir de julio", reveló.

Paredes también habló de la singular estructura radial del inmueble, un modelo panóptico que proliferó en los establecimientos penitenciarios del siglo XIX, y que permitía ver todo el interior del edificio desde su cuerpo central. "El lugar que ocupaban las galerías con las celdas es donde hoy están las estanterías con los documentos", explicó.

Tras la introducción llegarían las visitas guiadas, con los numerosos participantes repartidos en grupos que, guiados por los funcionarios del Archivo, recorrieron el edificio. "La estructura es impactante, con esa forma que permitía a los funcionarios ver todas las celdas desde el centro. No tenía ni idea de cómo era esto", explicaba la mierense Emilia Fernández, durante el recorrido.

La otra zona que despertó más interés fue una reconstrucción de cuatro celdas, cada una representativa de un momento de la historia del inmueble, localizada en el extremo de una de las galerías. Los visitantes se sorprendieron al ver cómo las celdas amplias y dignas de principios del siglo XX se convertían tras la guerra en espacios mucho más siniestros. Ese escenario y el de la celda que recreaba las condiciones los años 70 del pasado siglo y la Transición, cuando la población reclusa se multiplicó y se hacinaron hasta cuatro reclusos por habitación, dieron a los visitantes una imagen más próxima del penal a la que ofrece el cine carcelario. "¡Menudo agobio!", exclamó María Elena Fernández, al verse por fin dentro de una celda. El Archivo completará hoy una segunda jornada de puertas abiertas: se podrá recorrer libremente el edificio entre las 10.00 y las 14.00 horas, y habrá una última visita guiada a partir de las 12.00 (requiere reserva llamando al 985225769 o enviando un correo electrónico a la dirección archivohistorico@asturias.org).

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