El Sporting trabaja para que Otero tenga pasaporte español

El club iniciará trámites para que el colombiano no ocupe en un futuro una de las dos plazas de extracomunitario

Otero, junto a Olaetxea

Otero, junto a Olaetxea

Andrés Menéndez

Andrés Menéndez

El Sporting tiene previsto iniciar trámites para que el delantero Juan Otero, firmado en propiedad para los siguientes tres años, pueda contar con pasaporte comunitario. Para que el atacante colombiano, de 29 años, consiga la doble nacionalidad se necesitan varios meses de trabajo, con una larga burocracia. Es decir: el proceso aún no se completará de forma inminente, por lo que el club rojiblanco no podría contar aún para este mercado de fichajes en verano con otra plaza extracomunitaria.

Hoy el Sporting tiene completo el cupo de extracomunitarios de su primera plantilla con los dos delanteros que han llegado a Mareo precisamente este mismo verano: Jordy Caicedo (Ecuador) y el propio Juan Otero (Colombia) tras rescindir con Club América. En Segunda División La Liga solo permite que cada club de fútbol tenga un máximo de dos futbolistas extracomunitarios. En Primera División la patronal es menos estricta y eleva a tres el límite de jugadores no comunitarios. La comisión deportiva del Sporting tiene aún trabajo por delante en lo que resta de mercado para cerrar un lateral derecho, un central, un extremo y otro delantero, y salvo giro, inesperado, los refuerzos no pueden ser extracomunitarios. Es decir: trabajará con una restricción importante, si bien la comisión deportiva ha dado prioridad absoluta a que todos sus refuerzos gocen de experiencia en el fútbol español. Hace dos años llegó a la entidad el zaguero argentino Cali Izquierdoz. Pero el ex capitán de Boca Juniors tenía doble nacionalidad, en concreto la italiana. Es decir: no ocupaba plaza de extranjero, lo que permitió una incorporación que si no habría quedado descartada.

Por todo ello de cara a futuro, liberar la plaza del delantero de Sipí es importante para las gestiones del club. Otero cumple en principio los requisitos. Lleva dos años de forma consecutiva en España, donde podría estar hasta cinco cursos si cumple el contrato firmado hace tan solo unos días con el club rojiblanco. Hace casi diez años estuvo otra temporada en España, en concreto en el filial del Deportivo de la Coruña, aunque para obtener la doble nacionalidad se necesitan al menos dos años de forma consecutiva en España. De hecho, Esteban Lozano, delantero mexicano que regresa al Sporting Atlético en calidad de cedido, también podría obtener la doble nacionalidad, uno de los grandes objetivos que tiene su equipo de origen, Club América.

Por otro lado, el Sporting ultima con el Zaragoza el acuerdo para firmar a Sergio Bermejo, en una operación avanzada por LA NUEVA ESPAÑA.

El atacante madrileño tiene cerrado al cien por cien su acuerdo con el club rojiblanco, pero ayer volvió a ejercitarse a las órdenes de Víctor Fernández con el club aragonés a la espera de que se resuelvan esos pequeños flecos que restan para cerrar el negocio, que no peligra. Bermejo tiene un año más de contrato en la entidad maña. El Zaragoza quiere un porcentaje por una futura venta y una compensación si el club rojiblanco consigue ascender a Primera División. Las gestiones entre entidades continuaron en las últimas horas y está previsto que las comunicaciones sigan en los próximos días hasta que se cierre el acuerdo.

Bermejo encaja en los parámetros de la comisión deportiva por su experiencia en la Liga, su conocimiento de la competición, además de capacidad para competir en las dos bandas y en posiciones interiores. Además es un jugador que tiene el visto bueno de Rubén Albés. Los dos coincidieron en el filial del Celta, en la segunda parte de la temporada 2019-2020. Bermejo fue diferencial en aquellos meses con Albés, rendimiento que le impulsó para llegar al fútbol profesional. Además, la comisión deportiva mantiene en su hoja de ruta a Jonathan Dubasin, pero no es un movimiento que se pretenda hacer a cualquier precio. En las últimas semanas no se ha avanzado nada, porque el Basilea, club que tiene el control del atacante, ha marcado unas exigencias altísimas para sacar cedido al jugador. No se descartan más comunicaciones entre las partes.

Suscríbete para seguir leyendo