Divorcio a la vista en Supervivientes: 'All Stars' con Kiko Jiménez como protagonista: "En estos momentos prefiero estar sola"

El doble exconcursante de Supervivientes se ha visto en una situación muy tensa

Divorcio a la vista en Supervivientes con Kiko Jiménez como protagonista: "En estos momentos prefiero estar sola"

Divorcio a la vista en Supervivientes con Kiko Jiménez como protagonista: "En estos momentos prefiero estar sola" / TELECINCO

Las preocupaciones de Sofía Suescun sobre lo que puede estar ocurriendo en Madrid son casi tan grandes como las que su pareja, Kiko Jiménez, y su madre, Maite Galdeano, tienen acerca de su concurso. Y es que Suescun se desenvuelve como pez dentro del agua en los realities, siendo de las pocas que ha conseguido imponerse en Supervivientes y en Gran Hermano.

Sin embargo, eso no le evita que esté preocupada sobre lo que pueda estar pasando en su hogar. "¿Estará pasando algo fuera?", mencionó en un momento del concurso la navarra. "Cuando estoy yo siento que está todo en orden, pero es que es irme y no sabes cómo te puedes encontrar mi casa. El uno se pelea con el uno, el otro con el otro... espero que Kiko esté poniendo orden porque es como que siento que esa casa sin mí se pone patas arriba y es incontrolable", explicaba sus dudas.

A miles de kilómetros, en el plató de Supervivientes: 'All Stars', Kiko ponía palabras a las dudas de su novia. "Le dará ansiedad pensar que no está ella y que nos deja aquí a todos, que está su madre, su hermano, yo... todos tenemos mucho carácter, somos como somos y ya nos conocemos". Y es que fue Maite Galdeano la que arrojó algo de luz sobre las preocupaciones de su hija.

Como si pudiese leer la mente, Sofía estaba preocupada y con razón, y es que en su casa las cosas no parecen ir muy bien. Siempre se ha alabado la buena relación entre Maite y Kiko, pero parece que es Sofía la que consigue que se respire la paz en el hogar. "No me hace gracia esta situación, la mayor preocupación de Sofía es que esté todo bien", desvelaba Maite, preocupando algo más a los espectadores.

Al final, tuvo que ser Kiko el que saliese a exponer la verdad y contar como están llevando las cosas sin Sofía. "Lo que no puede ser es que estemos ella y yo como si fuéramos pareja. Ella es mi suegra, está muy bien que ella haga su vida y yo también hago la mía, nuestro vínculo es Sofía y está a 8.000 kilómetros".

Finalmente, Maite quiso quitarle peso al asunto y cerró el tema dejando claro que no ocurre nada grave en la casa y que las dudas de Sofía son razonables, pero no se sustentan sobre nada seguro. "Quiero mucho a mi hija, por ella muero. El amor de una madre es infinito. No pasa nada, pero he preferido tomar esta situación".