El proyecto del vial en superficie de Jove incluye tres pasarelas peatonales con carril bici

Ese bulevar urbano de cuatro carriles en superficie en el que está trabajando el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible como alternativa a un vial de Jove soterrado incluye la construcción de tres pasarelas que permitan ir de uno a otro lado de la carretera a quienes transiten por la zona a pie o en bicicleta. Son tres pasarelas peatonales con carril bici cuya ubicación dependerá del resultado del proyecto que el Ministerio le acaba de encargar, como adelantó LA NUEVA ESPAÑA, a la sociedad mercantil estatal Ingeniería y Economía del Transportes (Ineco). Un contrato con un coste de 2,7 millones y un plazo de ejecución de doce meses que ha generado un gran revuelo en el movimiento vecinal gijonés ya que confirma que el Ministerio sigue adelante con la opción que llevó a las calles a los vecinos para mostrar su rechazo: un vial de Jove en superficie.

Razones de inviabilidad técnica y problemas de seguridad para las edificaciones del entorno del Lauredal llevaron al equipo ministerial de Óscar Puente a dar marcha atrás el proyecto de vial de Jove soterrado cuando ya se estaba en la fase de selección de la constructora. Fue el pasado mes de marzo y con esa decisión desaparecían los 286 millones autorizados para la obra en plena campaña electoral. De la que comunicaba esa noticia; el secretario de Estado de Transportes, José Antonio Santano, avanzaba que el Ministerio veía más conveniente, seguro y viable ejecutar el vial de Jove sobre el mismo trazado pero en superficie y complementar la actuación con un plan de mejoras en Príncipe de Asturias. Eso es precisamente lo que le acaba de encargar a Ineco que proyecte calculando que el coste de ambas obras ronde los 73 millones. Una cuarta parte del coste del vial soterrado. El Ministerio avanza en ese vial en superficie al que dijo no el movimiento vecinal gijonés, el Ayuntamiento y el Principado en una unidad política y social que se visibilizó en el Consejo Social de la ciudad. Gijón no quiere que los problemas que supone ahora el tránsito de camiones hacia o desde El Musel por La Calzada pasen a Jove. Quieren que se acaben los problemas.

Esas tres pasarelas peatonales con carril bici pendientes de ubicar son una de las estructuras nuevas a las que hace referencia la orden de estudio a Ineco enviada por la Dirección General de Carreteras en base a ese nuevo proyecto titulado "Bulevar urbano de acceso al puerto de El Musel desde el enlace de la Peñona por el vial de Jove y acondicionamiento de la carretera N-641 del punto kilométrico 0-000 al 2-510. Tramo AS-18-Puerto de El Musel".

Viaducto ferroviario

No es la única estructura nueva o reformulada de la que se habla en el contrato. A Ineco se le encarga también estudiar alternativas para "definir la estructura que mejor resuelva" la intersección con la glorieta de Príncipe de Asturias y el cruce de la vía del ferrocarril Musel-Veriña en el entorno del viaducto existente. El Ministerio deja claro que la alternativa elegida tiene que dar respuesta a proyectos de futuro que ahora mismo tiene en cartera el puerto de El Musel. Muy en concreto a la puesta en marcha en territorio portuario de una fábrica de estructuras de soporte para aerogeneradores que necesitan para su traslado de camiones "de dimensiones extraordinarias". A modo de ejemplo se plantea la idea de crear un nuevo viaducto ferroviario junto al actual con un gálibo adecuado sobre el vial de acceso viario al puerto. Habría que comprobar si ese nuevo viaducto obligaría a elevar la rasante de la línea de ferrocarril actual. Hay otras estructuras vinculadas al paso del ferrocarril por la zona que ya se fijaban en el fallido proyecto de vial soterrado y que habría que reajustar al nuevo diseño.

Un reparto de 23 cámaras en 15 puntos para ver el tipo de vehículos que pasan y los aforos

El epígrafe de nuevas estructuras se completa con la mención a muros, a la cimentación para las pantallas acústicas que minimicen el ruido que del tráfico llegue a los vecinos de esa zona y la estimación de que haya que hacer dos obras de drenaje transversal. Eso se decidirá tras evaluar los estudios hidrológicos y no conllevará actuaciones de gran envergadura como si ocurriría con una actuación bajo el subsuelo.

Aunque el nuevo proyecto podrá reutilizar mucho del material que se ha ido elaborando en los varios años de trabajos fallidos dedicados al vial de Jove lo cierto es que el Ministerio impone hacer un nuevo estudio geotécnico y un nuevo estudio de tráfico. En este último caso teniendo en cuenta que hay que analizar tanto las previsiones de circulación de vehículos desde La Peñona a El Musel como de la avenida de Príncipe de Asturias hasta la rotonda de la avenida de la Constitución. Por ello, además de revisar la documentación de las campañas de campo realizadas en 2018 y 2021 se encarga una nueva para controlar los aforos sobre el entorno de siete puntos situados en las posibles conexiones que el nuevo vial en superficie vaya a tener con la trama urbana existente.

Un reparto de 23 cámaras en quince puntos para ver el tipo de vehículos que pasan y los aforos

La idea es colocar 23 cámaras –entre una y tres dependiendo de la ubicación– en quince puntos para controlar todos los giros posibles. Las ubicaciones de las cámaras para el control de aforos serían en: carretera de Avilés con camino del Cementerio, carretera de Avilés con calle del Camón y calle Pololo, calle del Camón con Manuel Hevia Carriles, avenida de El Cerillero con calle Concejo de San Tirso de Abres, avenida de El Cerillero con camino del Rubín y avenida del Lauredal, calle Betty Friedan con calle Manuel R. Álvarez, glorieta de Príncipe de Asturias, Príncipe de Asturias con calle Brasil, Príncipe de Asturias con calle Guatemala, Príncipe de Asturias con calle Filipinas y avenida de Galicia, Príncipe de Asturias con avenida de los Campones, Príncipe de Asturias con el polígono de Promosa, Príncipe de Asturias con GJ-81 en dos ubicaciones y la glorieta de la avenida de la Constitución.

Sería una toma de datos en esos puntos durante 24 horas en periodos de 15 minutos y distinguiendo la tipología del vehículo. No hay que olvidar que el problema para los vecinos está en la contaminación atmosférica y acústica que genera el elevado tránsito de vehículos pesados que conlleva El Musel y que ahora pasan por Príncipe de Asturias en su condición de carretera general aunque pase por medio de un barrio tan poblado como La Calzada. Un paso de mercancías que aumentará con los proyectos de expansión que tiene el Puerto.

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